La Vanguardia | Enric Juliana, 2012/11/21
Marrón glacé
El «borrador» ahora resulta ser una suma recortes. Un puzle. Un ensamblaje. Un pastel con diversos ingredientes: cuatro informes policiales judicializados -es decir remitidos en su momento al juez que instruye el caso Palau, publicados por la prensa y en los que no aparecía el nombre de Artur Mas-, comentarios de internet, recortes de prensa, escritos anónimos... «Una hipótesis de Asuntos Internos es que no se descarta que una o varias personas elaboraran un borrador de informe a partir de múltiples elementos», señalaba ayer una fuente del Ministerio del Interior. En pocas palabras, no encuentran el documento y se admite la hipótesis de un recorta y pega con membrete de la Policía. Un traje a medida para la campaña electoral. Un Kompromat, que dicen en Rusia. (...) Un Kompromat castizo. Un marrón.
En el viejo caserón del paseo de la Castellana están lógicamente preocupados: no encuentran el documento que acusaría a Mas de un grave delito, han de barajar la hipótesis del puzle y sólo faltan cinco días para las elecciones en Catalunya. Si el Gobierno no conoce el documento y no sabe quién lo ha ensamblado, algo muy raro está pasando en España en un momento de gran expectación internacional. Mal momento para los Kompromat de andar por casa. Dos imágenes, dos marcos, están en juego. El de una clase dirigente catalana irremediablemente corrupta y envuelta en la bandera, o la de un aparato del Estado -o una fracción del mismo- que actúa a la desesperada para alterar el resultado de los comicios en Catalunya, por miedo a la victoria soberanista. Lanzar al aire una moneda con esas dos caras a cinco días de unas elecciones electrizantes es una temeridad que no encaja con una visión mínimamente estratégica del futuro de España. Eso es obra de aventureros. Es demasiado rústico. (...).
Papeles, papeles, papeles. En ocasiones hay quien conserva papeles de una anterior legislatura. Papeles que son glaseados cuando llega el momento oportuno. En Madrid hay gente seria, muy seria, que se está llevando las manos a la cabeza ante la posible castaña. Castaña confitada.