Firmó en Anoeta uno de sus mejores partidos como rojillo
Nano consigue asentarse en el lateral izquierdo
Natxo MATXIN
No ha sido una adaptación fácil. Nano llegó a Osasuna este pasado verano con la difícil misión de ocupar un puesto huérfano desde que Natxo Monreal fichase por el Málaga. Coincidiendo con la salida del de Eskirotz, el lateral izquierdo ha sido un continuo quebradero de cabeza para la escuadra rojilla. Parece que las cosas pueden cambiar de ahora en adelante, a tenor de la evolución del jugador gallego.
Y es que el espigado futbolista de A Coruña no ha tenido un inicio de campaña sencillo. Primero, porque no pudo entrar en el once del comienzo liguero debido a sus problemas físicos, y después porque cuando Mendilibar le dio una oportunidad se demostró que no estaba en plenitud de facultades como para competir en Primera. El técnico vizcaino incluso tiró, como ya había hecho con anterioridad, de hombres menos específicos para esa posición, caso de Damià Abella.
Daba la impresión de que Nano volvería a ser uno de esos fichajes sin recorrido que acaban cayendo en el ostracismo. Sin embargo, a base de minutos, el exculé ha ido cogiendo ritmo y presencia hasta convertirse en un fijo en el equipo titular, coincidiendo con el mejor momento del equipo.
«Cada día me encuentro mejor -confirmó-, con continuidad un jugador se encuentra más cómodo». En Anoeta le tocó, además, la complicada tarea de bailar con la más fea y recibiendo una amarilla en los primeros minutos. «Eso te condiciona un poco para el resto del partido y hay que presionar con más cuidado, pero son gajes del partido», admitió.
Lo cierto es que la escuadra navarra ha demostrado en las últimas jornadas que está bastante más sólida atrás. «El equipo defensivamente ha mejorado bastante y ofensivamente no estamos teniendo la suerte de cara al gol como en el partido frente al Espanyol, pero se está trabajando bien, creando ocasiones y esto son rachas. Espero que contra el Rayo esas oportunidades se materialicen», dijo.
Línea ascendente
En ese mismo sentido, el lateral comentó que ve al cuadro rojillo «en línea ascendente» y que, caso de conseguir una victoria frente a los vallecanos, «igual podemos salir de los puestos de descenso. Está claro que el equipo es otro con respecto a hace un mes y pico».
Pero antes de que los de Paco Jémez visiten El Sadar, este martes habrá que disputar la vuelta de los dieciseisavos coperos enla que será obligado superar el 1-0 encajado en El Molinón. «La gente está con ganas de pasar la eliminatoria y llegar lo más lejos posible. Ahora tenemos que estar centrados en este partido y hacerlo bien». Parece claro que será, además, una buena ocasión para los menos habituales de demostrarle a Mendilibar que se merecen un hueco.
Nano ha dejado patente en estos últimos partidos su pasado como carrilero, ya que destaca sobre todo por su carácter ofensivo. En Anoeta intentó el disparo a puerta en varias ocasiones.
Aunque no dio esa impresión sobre el campo -fue uno de los mejores en la labor de contención-, lo cierto es que Miguel Flaño sufrió un esguince en su tobillo izquierdo en la primera parte.
Con ese diagnóstico, el central de Noain es, de momento, duda para jugar contra el Rayo el próximo viernes, por lo que habrá que esperar a su evolución a lo largo de la semana.
Por otro lado, Álvaro Cejudo también apareció en el parte médico, ya que sufre una contusión en el cuádriceps izquierdo, que le obligó a ser cambiado en el descanso.
N.M.
Mañana será el último día para que los socios puedan retirar una invitación infantil y otra de adulto para el partido copero contra el Sporting. El esfuerzo económico que va a realizar el club para facilitar la asistencia a El Sadar impide que haya servicio de autobuses.
Aunque en principio estaba previsto que la plantilla osasunista no guardase descanso de aquí hasta la disputa del partido contra el Rayo, Mendilibar decidió finalmente que hoy fuese día de descanso. Se regresará al trabajo mañana a partir de las 10.00 en Tajonar.