Maite SOROA | msoroa@gara.net
Lo que entienden por Estado de Derecho
De tanto traer a esta lupa las barbaridades que se escriben en la prensa más ultramontana de Europa, esa que se publica en el infraebro, servidora pensaba estar curada de espanto. Pero resulta que no, que una aún puede sorprenderse ante las barbaridades que pululan por ahí. En este caso ha sido un habitual, Pascual Tamburri, quien en «Elsemanaldigital» nos muestra de qué pasta está hecho. En su última columna afea al PSE que haya «decidido que su último acto antes de salir del Gobierno vasco sea un homenaje público a los etarras Ángel Otaegui y Juan Paredes Manot, Txiki» -aunque eso no sea cierto, porque nadie en el partido de López y cía. ha homenajeado a Txiki y Otaegi-, y a continuación escribe lo siguiente. Lean, porque no tiene desperdicio: «Se trataba de asesinos múltiples y confesos, miembros de un grupo terrorista internacionalmente reconocido como tal, y ambos fueron juzgados y condenados conforme a las leyes vigentes en un Estado de Derecho en el momento de los delitos». Un grupo terrorista internacionalmente reconocido era el Gobierno de Franco, un dictador como la copa de un pino que decidió fusilar a los dos miembros de ETA y a otros tres revolucionarios como antes había asesinado a cientos de miles de personas. Y Tamburri nos habla de «un Estado de Derecho».
Luego, el navarro que al parecer es profesor -¡pobres alumnos!- añadía que «vaya cara la de unos socialistas que dan un paso que el PNV nunca dio, que buscan en la extrema izquierda marxista y terrorista su única posibilidad de retorno al poder. Puestos a elegir, qué quieren que les diga, prefiero a Urkullu que a Patxi López, por lo menos sabemos qué quiere y seguro que con su gente se puede hablar en paz y sentar civilizadamente a la misma mesa». Servidora no sabe si a Urkullu le hace mucha gracia que Tamburri le prefiera a él, pero si fuera el jelkide me lo pensaría. Dicho esto, y antes de entrar a hablar de lo poco que le queda a UPN en el Gobierno navarro, señala que «notables poderes fácticos de todo tipo apuestan por posibilidades insólitas, basta ver las adhesiones y amigamientos que va recibiendo el brazo político de la ETA». Poderes fácticos dice, el del Estado de Derecho franquista...