Difícil papeleta a la que se enfrenta el único candidato a la reelección como rector de la UPV-EHU a las puertas de la cita con las urnas del 4 de diciembre, que puede ver truncado su objetivo por la decisión que tome sobre el pago de la paga «extra» en la nónima de diciembre y no por el programa y modelo que universidad que defiende.

La determinación del Ejecutivo de Lakua de abonar a su personal la «extra» tiene repercusión en la mayor universidad pública vasca, ya que si la justificación son los presupuestos de la CAV, estos también afectarían al profesorado laboral y al personal de administración y servicios (PAS) de la UPV-EHU. Asimismo, se da la paradoja de que el profesorado funcionario -catedráticos y titulares- podría quedarse al margen de esa argumentación jurídica, aunque precisamente son los 2.216 catedráticos y titulares quienes tienen el voto ponderado más cualificado en los comicios del próximo martes (56,25%) y los que pueden provocar el naufragio de la candidatura de Goirizelaia si optan por el voto en blanco.

La situación va a obligar al rector en funciones a tomar decisiones en pocas horas, como más tardar mañana, cuando se presente ante el Claustro extraordinario para dar a conocer su programa y responder a las interpelaciones que se le podían formular hasta el martes, cuando se supo de la postura del Gabinete de Patxi López.

Por el momento, Iñaki Goirizelaia se mueve con cuidado, como ayer quedó de manifiesto en la entrevista que le hicieron en ETB. El rector y candidato a la reeleccion aseguró que se estudiará «de arriba a abajo» el informe del Gobierno autonómico para analizar si la Universidad también puede abonar la paga a sus trabajadores. «Si hay una posibilidad legal de proceder al pago, lo haremos», dijo, reiterando las argumentaciones que expuso en la entrevista que el sábado publicó GARA.

Goirizelaia sí reconoció que «es más optimista» tras el anuncio de Lakua, aunque precisó que hay que ser «también realista» y «estudiar con detalle» el informe jurídico en el que se ha basado la resolución del Ejecutivo López «y en función del contenido, tomar la decisión». Tuvo que aclarar que la realidad de la UPV-EHU es distinta, ya que parte de su personal depende de los presupuestos de la CAV y otros, los funcionarios, del Gobierno español, vía Cupo, para los que no encuentra argumento jurídico para abonarles la «extra» y los que condicionan su reelección.

La alta abstención y el voto de rechazo al proyecto de Goirizelaia -el voto en blanco-, que hasta la fecha patrocinan UGT y CCOO explícitamente, puede tener eco entre el personal de la Universidad en el caso de que el rector no apueste por el pago de la «extra» para el conjunto de los 6.950 trabajadores de la UPV-EHU, de los que 1.550 corresponden al PAS y otros 5.400 son personal docente e investigador, de ellos 2.216 funcionario permanente y 3.193 laboral permanente.

LAB, sindicato mayoritario en el profesorado laboral y con una fuerte implantación en el PAS, espera que la decisión del rector sea la de realizar el pago de la «extra» en la nómina de diciembre a todo el personal.

En caso de que no fuera así, recurriría por la vía judicial el no abono al PAS y al profesorado laboral. El sindicato ELA también exigió al pago «inmediato» de la «extra» y se concentrará mañana, a partir de las 9.30, frente al Paraninfo de la UPV-EHU, en Bilbo.