Los participantes en el turno navarro del ayuno en contra del TAV acudieron ayer a la UPNA, donde se reunieron con estudiantes para denunciar «el derroche» en esta macroinfraestructura mientras el Gobierno navarro recorta las partidas en educación.

A continuación, se realizó una parodia con un TAV simulado que recorrió los pasillos, la cafetería, la biblioteca y otras estancias de la UPNA, y en la que participaron estudiantes de Asamblea Libertaria, Ikasle Abertzaleak. Ingenieros Sin Fronteras, alumnos de Trabajo Social y Eraldatu.

Los colectivos estudiantiles denunciaron que «este tren está pensado solamente para unos pocos que puedan pagarlo, los daños ecológicos que supone son incontables e irreparables y quienes sufrimos estos daños ecológicos somos nosotros y no los señores ejecutivos que a buen seguro van a obtener sustanciosos beneficios con este tren».

Los participantes en el ayuno también denunciaron el martes que el proyecto del TAV tiene influencia en los recortes en sanidad mediante una concentración ante el Complejo Hospitalario de Nafarroa. La privatización de las cocinas hospitalarias tuvo un lugar destacado en esta protesta.

Prueba de carga

Por otra parte, Adif informó ayer de que ha efectuado las pruebas de carga en los dos viaductos del tramo Aramaio-Arrasate del TAV para «confirmar que la construcción de la obra se ha desarrollado de forma satisfactoria».

El tramo Aramaio-Arrasate discurre a lo largo de 3,4 kilómetros e incluye el túnel de Atxetarri (500 metros), el viaducto sobre la A-2620 (1.392 metros) y el de Etxebarri (307 metros).