El Ibex no pudo superar los 8.000 puntos y retrocedió ayer un 0,49%. El lunes saldrá desde los 7.934,60 puntos. Pese a este recorte, encadena una racha de cuatro meses al alza tras cerrar noviembre con una subida del 1,17%. En el resto de plazas europeas, excepto Fráncfort (+0,06%), también se impuso el color rojo. Londres bajaba un leve 0,06%, y París, un 0,33%. El Dax (+25,55%), el Cac (+12,58%) y el FTSE 100 (+5,29%) presentan balances anuales positivos, mientras que el Ibex mantiene el tipo -solo cae un 7,37%- pese a la calamitosa situación de su economía y sus finanzas públicas. Según los expertos, la creencia de que Europa no dará la espalda al Estado español mientras cumpla con las exigencias de Bruselas es el argumento básico para entender este moderado castigo a la bolsa. Así las cosas, se imponían la cautela a la espera de más referencias sobre las negociaciones en Estados Unidos para acordar la política fiscal y la digestión de las malas perspectivas anunciadas por la OCDE. Por valores del Ibex, destacó el derrumbe de Bankia (-25,31%) con la vista puesta en su macroampliación. Por detrás quedaron los descuentos de Gamesa (-4,90%) y Acerinox (-4,84%). En el grupo de los grandes solo Santander (+0,34%) acabó en positivo. La lista de ganadores estuvo liderada por Técnicas Reunidas (+2,48%) y Acciona (+2,15%). Dentro del Cac, que sube un 2,83% en el mes, sobresalieron los avances de EADS (+2,35%) y ST Microelectronics (+1,96%). Las acciones de Alcatel-Lucent (-7,47%) fueron las más castigadas, pese a la obtención de un contrato en América con un consorcio de operadores.