Impotencia sintieron ayer los vecinos de Usansolo después de que la falta de voluntad política del PNV les cerrase en las Juntas Generales de Bizkaia la puerta a la posibilidad de seguir con el proceso de segregación que emprendieron formalmente en 1988. Anunciaron que recurrirán al contencioso contra la nueva norma foral de Demarcaciones Territoriales que les impide desanexionarse de Galdakao, como desea la mayoría de los residentes.

A las puertas de la Casa de Juntas de Gernika, un centenar de usansolotarras reivindicó su derecho a decidir mientras en la Cámara vizcaina los votos de los junteros jeltzales rechazaban la enmienda de Bildu que proponía no impedir que el proceso iniciado prosiga. A la coalición soberanista se sumaron los junteros del PSE, mientras los del PP se abstuvieron.

Si en la enmienda hubo división de opiniones, PNV, PSE y PP sumaron sus votos para sacar adelante la nueva norma foral, que impide la constitución de nuevos municipios en Bizkaia aduciendo razones económicas, ya que la Diputación estima que generarían un mayor coste para su funcionamiento.