La Diputación de Gipuzkoa ha adjudicado la construcción del tramo de la GI-632 entre Antzuola y Bergara a las empresas Moyua y Antzibar, mientras que la asistencia técnica correrá a cargo de Girder y Saitec. En la nota emitida ayer, la institución foral subrayó el «gran esfuerzo» realizado para incluir en el proyecto de presupuestos del próximo año la construcción de esta carretera porque considera que «es fundamental desde el punto de vista de la estructuración de Gipuzkoa, y también de Euskal Herria, ya que sirve de unión entre distintos territorios». La GI-632 forma parte del eje Beasain-Durango.

La Diputación precisó que el departamento de Movilidad e Infraestructuras Viarias cuenta con un presupuesto de 117 millones, del cual se destinará el 33,67% a construir ese tramo.

En cuanto al proyecto de construcción, el presupuesto de licitación era de 63.653.851,90 euros. Once candidatos presentaron sus propuestas ante la mesa de contratación, que realizó la propuesta de adjudicación a favor de Construcciones Moyua SL y Antzibar SAU. Esta unión temporal de empresas hizo una propuesta por un importe de 40.038.272,84 euros, con un plazo de ejecución de 25 meses.

En cuanto al ámbito laboral, el contratista deberá aplicar el Convenio Colectivo de la Construcción y Obras Públicas de Gipuzkoa, así como todas las condiciones de seguridad y salud.