El Mendi Film Festival ya tiene los motores más que calientes. Todo está a punto, aunque de cara al público será el próximo viernes cuando la quinta edición se ponga en marcha. Ya han pasado cuatro años desde que naciera en Gasteiz el Festival de Cine de Montaña de Euskal Herria. Esto último, siempre con todo el respeto a los organizadores, lo decimos nosotros. Sí, nació en la capital alavesa, pero para la quinta edición ha dado un salto de capital y se ha trasladado a Bilbao. Y nos hacemos la pregunta: ¿Por qué no de aquí a unos años su traslado, por ejemplo, a Donostia?

Pero dejemos a un lado la bolita mágica y centrémonos en lo que va a deparar a partir del próximo viernes, y hasta el día 23, esta nueva propuesta de cine de deportes de montaña, naturaleza y cultura de montaña con claro carácter internacional.

A pesar de la espectacular crisis económica que nos azota, el Mendi Film Festival ha podido seguir la línea marcada en sus cuatro anteriores ediciones. Sí, como afirman los propios organizadores, no ha sido nada fácil mantener el nivel de los cuatro años anteriores. La crisis se nota y mucho, pero el gran trabajo de los organizadores y los apoyos económicos que ha tenido -los cimientos de este certamen- siguen por ahora firmes.

Y con la llegada del viernes se abren las puertas a la cultura de montaña en formato películas que serán las grandes protagonistas de este Mendi Film Festival. Pero, como en años anteriores, esta cultura se multiplica y va acompañada de numerosas actividades paralelas y otros filmes fuera de concurso.

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Pero, como adelantamos, las películas a concurso, sobre todo, serán las pricipales estrellas del festival. El jurado presidido por la francesa Mireille Chiocca no lo tendrá nada fácil a la hora de elegir las mejores cintas entre el medio centenar presentadas al fstival. Los otros cuatro miembros del jurado serán Bárbara Estefanis, Iñaki Gauna, Javier Alonso y Joni Cooper.

Medio centenar de filmes que, como es habitual, han llegado desde distinto puntos de la geografía mundial. Destacan 16 cintas estadounidenses, nada más y nada menos que 9 producciones vascas, otras 8 del Estado francés, 4 de Catalunya...

50 filmes en total entre las cuales el jurado concederá ocho premios. El más importante, con una dotación de 3.500 euros, será el Gran Premio a la mejor película. Los otros siete galardones se concederán a la mejor película de montaña; a la mejor película de deportes de montaña; a la mejor cinta de montaña-medio ambiente-ecología; a la mejor fotografía, premio del jurado; la mejor película en euskara; el mejor cortometraje y el premio del público.

Ya que estamos centrados en las estrellas principales de este certamen de filmes de montaña, cabe señalar que en esta última edición se podrán ver nueve películas a concurso que ya han sido premiadas en otros festivales internacionales, como el canadiense de Banff, el británico de Kendal, el italiano de Trento o el catalán de Torelló.

Que el Mendi Film Festival sea el último de los festivales del año le da esa «ventaja» y le proporciona ese gran aliciente. Como indicábamos, a estas alturas ya sabemos qué películas han sido las mejores en los distintos festivales internacionales, y nueve de ellas las podremos ver en Bilbo: «Autana, first ascent in the lost world», «Himalaya, Le Village Suspendu», «Of Souls+Water-The Warrior», «Wide Boyz», «Living with the volcanoes», «La Dura Dura», «Verticalmente Demodé», «I Believe I can Fly» y «Honnold 3.0». Es decir títulos de algunos de los mejores directores mundiales de esta modalidad como Fulvio Mariani, Pavol Barabas, Alastair Lee, Anson Foge o Jordi Canygueral.

Y tampoco hay que olvidar que durante estas jornadas de cine de montaña también asistiremos a varios estrenos. En definitiva, 50 películas a concurso y otras fuera de él que se ofrecerán en cuatro escenarios principales: la Sala BBK, la Alhóndiga, el rectorado de la UPV/EHU y el Palacio Euskalduna.

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En general, este es el guión principal del festival cinematográfico vasco que, a priori, siempre según los organizadores del Mendi Film, estará basado en la: «espectacularidad, dificultad, riesgo y compromiso, con la montaña como escenario. 50 cintas de las más destacadas de una modalidad de aceptación creciente, a pesar de no mostrarse habitualmente en las salas comerciales. Los amantes de las emociones fuertes van a disponer de una ocasión única para visionar en pantalla grande filmaciones espectaculares de deporte extremo».

Diez días intensos con dos sesiones diarias (16:00 y 19:00 horas) en las salas antes citadas, y con precios de 5 y 7 euros respectivamente. Habrá descuentos y un bono para todas las sesiones al precio de 68 euros.

Y, por si fuera poco, «apoyado» por un programa de actividades paralelas. Así, por ejemplo, el pasado fin de semana hubo dos muestras de slackline show en el Casco Viejo bilbaino y sobre las aguas de la Ría, en Abandoibarra. El fin de semana de clausura, el francés Antoine Le Menestrel ofrecerá sendas actuaciones, a medio camino entre el teatro y la escalada, en fachadas del Casco Viejo y de la Gran Vía.

El programa de actividades paralelas incluye asimismo algunas películas fuera de concurso y una exposición de fotografía panorámica del fotógrafo Santiago Yañiz. También se llevarán a cabo talleres impartidos por varios realizadores audiovisuales, una acción de recuperación del paisaje plantando más de mil árboles en el entorno del Pagasarri, así como la tradicional marcha al propio Pagasarri.

La información completa de la programación puede verse en: www.mendifilmfestival.com.