Todos los partidos comparten en Donostia un recuerdo a las víctimas
Representantes municipales de Bildu, PSE, PP y PNV. Todos juntos compartiendo unos minutos de silencio y depositando flores ante el monolito alzado en los jardines de Alderdi Eder, en Donostia. El Día Internacional de los Derechos Humanos ofreció en la capital guipuzcoana una imagen prácticamente insólita. Víctimas de ETA y de la violencia policial mostraron su satisfacción ante este «paso en positivo».
Imanol INTZIARTE | DONOSTIA
Todos los partidos con representación en el Ayuntamiento de Donostia tomaron ayer parte conjuntamente en un acto en recuerdo a todas las víctimas de la violencia, convocado por la comisión municipal de Derechos Humanos y coincidiendo con el Día Internacional de los mismos.
La presencia de los ediles del PP despejó la duda sembrada la víspera por su presidente en la CAV, Antonio Basagoiti, quien amagó con una posible ausencia de sus compañeros. A su juicio, el acto en recuerdo por «todas las víctimas» organizado el domingo por el Gobierno de Juan Karlos Izagirre y celebrado en el puerto supuso «un aplauso a los presos de ETA».
Pero finalmente el grupo de ediles que encabeza Ramón Gómez se presentó «donde siempre ha estado, que es con las víctimas del terrorismo, en el monolito en su memoria». La ofrenda floral tuvo lugar en la estatua colocada a tal efecto en los jardines de Alderdi Eder en enero de 2007.
En la placa, textualmente, se lee «en memoria de las víctimas del terrorismo y la violencia», aunque hasta la fecha solo había acogido homenajes a víctimas de ETA. De entre estas se pudo ver al periodista Gorka Landaburu o a Amaia Guridi, viuda de Santiago Oleaga, director financiero de «El Diario Vasco». Pero también asistió María Isabel González, viuda del músico Alberto Soliño, muerto en 1976 en Eibar por el disparo de un guardia civil.
Tanto Guridi como González aplaudieron el acto. La viuda de Santiago Oleaga abogó por «dar pasos adelante, en positivo. Eso espero, una unión de todos y que se intente avanzar. Se deberían dar más pasos y más avances», opinó. «Está bien la unidad para que se reconozca todo lo que ha pasado aquí, que se sepa. Ahora ya podemos decir que a mi marido lo asesinaron, que no murió en un accidente. Mis hijos y yo estamos contentísimos de que no se nos dé la espalda en ningún sentido», apostilló María Isabel González.
«Se ha conseguido un mínimo de consenso para recordar a todas las víctimas. La ciudadanía reclama y agradece gestos de este tipo», comentó el alcalde Izagirre.
El portavoz del principal partido de la oposición, Ernesto Gasco (PSE), destacó el esfuerzo realizado «por buscar la unión y por quitar las fricciones, que todavía las hay. Hoy empieza un camino. Lo hemos conseguido desde el silencio porque quizá aún tengamos diferencias sobre los textos, pero es el primer paso, que es lo que las víctimas están esperando».
Recuerdo a Iñaki Quijera
Los integrantes del equipo de Gobierno depositaron otro ramo de flores al otro lado del edificio municipal, en la confluencia de las calles Ijentea y Campanario. Una placa recuerda que, en 1979, en ese lugar cayó abatido por disparos de un agente de la Policía española el joven donostiarra Iñaki Quijera, que participaba en una manifestación por los refugiados políticos vascos.
El portavoz municipal de Bildu, Josu Ruiz, recordó que «el monolito situado en Alderdi Eder hasta ahora ha sido identificado con unas víctimas concretas» y que este segundo acto pretendía «complementar al principal, para reflejar a todas las víctimas en su conjunto».
Por su parte, la Diputación de Gipuzkoa reiteró su apuesta por «una justicia transicional, para que cese para siempre todo tipo de violencia y se respete el compromiso con los derechos humanos, en la vía del reconocimiento mutuo y la reconciliación. Debemos dar respuesta y solución al sufrimiento acumulado durante años. Para ello, la sociedad y las instituciones debemos responder a las razones que generan tal sufrimiento».
El diputado general, Martin Garitano, participó en una mesa redonda que se llevó a cabo en el Palacio de Aiete bajo el lema «Derechos Humanos, camino a recorrer». En ese acto también intervinieron el rector de la UPV-EHU, Iñaki Goirizelaia; el presidente de la Asociación Española para el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, Carlos Villán Durán; y la directora foral de Derechos Humanos y Memoria Histórica, Marina Bidasoro.
En el Día Internacional de los Derechos Humanos, Herrira recordó que en torno a 600 presas y presos vascos «sufren duras condiciones de vida», que sus familias continúan castigadas con «la política de alejamiento que aplican conjuntamente los gobiernos español y francés», y que cientos de personas se ven obligadas a vivir lejos de su hogar. Situaciones que, a juicio de este colectivo, se deben a un conflicto que ninguno de los dos estados quiere solucionar, ya que abogan por «aplicar una legislación de excepción y responder mediante las vías represivas a cualquier tipo de oposición que se organice en Euskal Herria». Por ello, emplaza a París y Madrid a que se impliquen en la solución e invitan a la ciudadanía a movilizarse.
Al hilo de esta efeméride, Herrira celebra hoy un debate, a las 19.00, en el Doka de Donostia. Tomarán parte Aitziber Blanco (Lokarri), Jon Garay (Herrira), Iratxe Urizar (Giza Eskubideen Behatokia) y el franciscano Paulo Agirrebaltzategi. La periodista Naroa Iturri será la presentadora.
Por otro lado, Herrira subió ayer a Internet el «lipdub» grabado el pasado sábado en Durango. El vídeo está en su web: «www.herrira.org». GARA