Al puerta a puerta le sobra batalla política, en Catalunya sería impensable que un partido político, fuese del color que fuese, se opusiera al puerta a puerta». Es el mensaje que nos dejaban hace unos días el alcalde de Taradell Lluis Verdaguer (CIU) y el técnico de medio ambiente Enric Coll en la conferencia que ofrecieron bajo el título «¿Polémica? No, resultados y economía», con el objetivo de dar a conocer la realidad del sistema de recogida puerta a puerta en Catalunya y esclarecer la multitud de informaciones contradictorias que se están difundiendo sobre este sistema. La ponencia nos sirvió para darnos cuenta de que en Catalunya el puerta a puerta no ha generado apenas polémica y que no es un foco de tensión social. Sin embargo, en Legazpi se ha creado un ambiente crispado, que nos preocupa y ocupa.

Nuestro Gobierno Municipal desde un principio ha tenido como prioridad hacer una gestión eficiente de los residuos, apostando por el sistema de recogida que actualmente mayor corresponsabilidad implica y mejores resultados ofrece. Tal es así, que después de conocer los primeros datos del estudio de viabilidad encargado por la Mancomunidad Sasieta a la empresa catalana Spora, para implantar un sistema de recogida selectiva de residuos más eficiente -estudio que analiza tanto el sistema puerta a puerta como el del quinto contenedor y que en realidad nació en la anterior legislatura- constatamos que la recogida selectiva puerta a puerta es una oportunidad para mejorar y avanzar hacia una gestión más sostenible de los residuos municipales.

En los últimos años hemos avanzado mucho y hemos alcanzado un índice de recogida selectiva de alrededor del 35%, pero ha llegado la hora de dar un nuevo paso en esa dirección. De toda la basura que generamos sólo el 10% no es reciclable, aproximadamente. En los municipios con puerta a puerta se está consiguiendo un promedio de recogida selectiva cercano al 80%. En cambio, en los municipios con contenedores de la propia Mancomunidad -incluso con el quinto contenedor- este promedio ronda el 45%.

El primer objetivo de la recogida selectiva de residuos puerta a puerta es conseguir la separación de los residuos en origen con objeto de recoger más cantidad de residuos valorizables y de muy buena calidad y reducir la cantidad de la fracción resto que se deposita en los vertederos. A través de un buen sistema de recogida personalizada, nuestra prioridad es conseguir un municipio más limpio, primando los criterios medioambientales, sociales, técnicos y económicos.

Desde el punto de vista ambiental, con el sistema puerta a puerta se prioriza claramente el aprovechamiento de los residuos valorizables, ya que la calidad de los residuos recogidos se asegura a través de un servicio individualizado y un control de calidad directo.

No debemos olvidar que el puerta a puerta es el sistema que mayor éxito nos garantiza a la hora de reciclar. Con este sistema quien está de verdad concienciado y a favor del reciclaje tiene la plena garantía de que sus residuos se van a recoger adecuadamente después de que haya hecho la separación, mientras que con los contenedores basta que diez familias lo hagan bien, y una mal, para arruinar el esfuerzo de los demás.

La recogida puerta a puerta apuesta por una escala más personalizada e individualizada e intenta adecuar los servicios, medios e información a las necesidades de cada caso. Precisamente por ello, queremos diseñar junto con la ciudadanía el sistema puerta a puerta que sea más apropiado para Legazpi, buscando con la Mancomunidad de Sasieta y con los vecinos y colectivos del pueblo soluciones a las inquietudes y cuestiones que puedan tener.

Finalmente, en lo que se refiere a la cuestión económica, cabe destacar que si se dedican más recursos a la recogida de residuos, parcialmente el coste del servicio puede aumentar, pero ese mayor esfuerzo en la recogida selectiva repercute favorablemente en los costes de tratamiento: se reduce la fracción resto a verter (144,3 euros/tn., algo que va incrementando poco a poco) y aumenta la recogida de papel, vidrio, envases y orgánico, sin olvidar la mayor calidad de esos materiales, lo que hace que esas fracciones valorizables generen ingresos importantes. En resumen, el balance económico global se equilibra e incluso puede llegar a ser más económico que un sistema de contenedores.

En Legazpi tenemos experiencia y un recorrido exitoso en temas medioambientales. Hace poco el Erreka Eguna de Legazpi recibió uno de los cinco Premios Udalsarea 21 a las mejores Prácticas en Sostenibilidad y el municipio también fue premiado con el tak21 de Oro, premio cuyo objetivo es reconocer la calidad global de las Agendas Locales 21 de los municipios del País Vasco. Además actualmente estamos dando un nuevo impulso al programa de autocompostaje y adecuando las papeleras existentes en el municipio con el objetivo de facilitar la recogida selectiva en la calle, que irá acompañada de una campaña informativa. Vamos por el buen camino y estoy convencido de que entre todos y todas conseguiremos un Legazpi más limpio y sostenible.

¿Por qué reciclar menos si se puede reciclar más? ¿Por qué no dejar un municipio más sostenible a las generaciones futuras? ¿Por qué no seguir siendo un pueblo referente y modélico europeo en materia ambiental? ¿Por qué pagar más si se puede pagar menos? ¿Por qué cerrar una puerta al futuro cuando la podemos abrir? Demos una oportunidad al puerta a puerta.