Cargos electos y profesionales del sector en Baztan, Bortziriak y Malerreka rechazaron, durante una comparecencia ayer en el Parlamento navarro, la reforma sanitaria impulsada por la consejera Marta Vera, al considerar que supondrá una merma en la calidad asistencial, al suprimir las guardias localizadas en una comarca con comunicaciones complejas.

La alcaldesa de Baztan, Garbiñe Elizegi, resaltó que la reforma de Vera, además de empeorar las condiciones laborales de los profesionales, se ha llevado a cabo sin consultar a los afectados y sin tener en cuenta el carácter euskaldun de la zona. Asimismo, reclamó que se mantengan las guardias presenciales en Oronoz «porque la zona quedaría desprotegida».

Iñaki Marcos, director del centro de salud de Elizondo, subrayó que «la guardia de calidad y la más eficaz es la presencial», y advirtió de que la reforma de Vera perjudicará las condiciones laborales de los profesionales sanitarios.

El responsable de la zona noroeste de Bomberos, Javier Ayerra, señaló que «no se garantiza una asistencia eficaz en las urgencias» y mostró la inquietud de los profesionales por no poder prestar un mejor servicio público.