El preacuerdo alcanzado en la madrugada de ayer, que contó con el rechazo de ELA, sindicato que tiene dos representantes en una mesa de quince, fija la reducción del número de despidos en el ámbito del Estado, donde los 480 iniciales pasan a 330, de tal forma que los datos referidos a las plantas vascas son orientativos. Según avanzaron los sindicatos firmantes, en la planta de Zamudio podría suponer rebajar en unas 30 las 85 salidas inicialmente previstas y en Nafarroa podrían pasar de 283 a alrededor de 204, es decir, unas 79 bajas menos.

En cualquier caso todos estos números quedan a expensas de la cifra total de trabajadores que se adhieran finalmente en cada centro --el plazo concluye hoy- a las condiciones de bajas incentivadas, ya que esta cifra se reducirá de la de despidos.

Hasta el momento, según fuentes sindicales, hay al menos 32 personas que han recurrido a la baja incentivada, lo que reduciría en la misma cifra el número global de despidos.

Hoy, referéndum

El preacuerdo, que establece una indemnización de 33 días por año trabajado, sin tope de anualidades, será sometido a referéndum hoy entre los 2.700 trabajadores afectados de las distintas plantas. Si obtiene el respaldo mayoritario de los empleados será firmado hoy mismo, coincidiendo con la fecha en la que termina el plazo de consultas del ERE.

Como contrapartida a la reducción del número de despidos, los sindicatos han aceptado la congelación salarial para 2013 y que las retribuciones de 2014 y 2015 aumenten en función del cumplimiento de determinados parámetros del Plan de Negocio. También se ha llegado a un acuerdo para «congelar» la antigüedad hasta 2015.

Durante este periodo sí se generarán derechos de antigüedad para el futuro, pero no se cobrarán, como mínimo, hasta el año 2016.

El sindicato CCOO calificó de «agridulce» el principio de acuerdo alcanzado con la dirección. Patxi Pierola, representante de este sindicato en Nafarroa, donde Gamesa cuenta con unos 1.700 empleados, señaló que han hecho «todo lo que hemos podido», «todo lo habido y por haber», pero queda una sensación «agridulce, más agria que dulce», ya que en todo el Estado serán despedidos 330 miembros de la plantilla.