Reggae, rap y dancehall perfilan la imaginativa propuesta de Glaukoma
Glaukoma es un grupo de tres estudiantes, un currela y un parado. Viven entre Donostia, Irun y Tolosa. Diferentes situaciones que en la hoja viñeta quedan coloreadas musicalmente por la mezcla sin prejuicios de rap, reggae, dancehall y algún toque ligero y extraño de metal y arreglos pop que no molestan. «Glaukoma Vol. 1», que está teniendo una excelente aceptación, lo publica Bonberena Ekintza, tanto en cedé como en vinilo.
Pablo CABEZA | BILBO
Glaukoma reside en varias localidades de Gipuzkoa, pero ensaya en Tolosa, así que es el pueblo que les curte, el que les tinta la piel de negro, que buena parte de negro tiene su música (y su portada), una extraña y singular mezcla donde el rap se funde con el reggae, el ragamufin, el dancehall, el pop y algún perfil que se aproxima al metal sin mostrarlo del todo, por no faltar no está ausente ni un tono latino medio rumbero, como en «Whisky vs Fanta», donde las guitarras demuestran que cuentan con numerosas posibilidades expresivas y que están tocadas con técnica y habilidad.
Bajo esta pluralidad de gustos y detalles, el elemento que lo une todo, como aquel viejo «imedio» que todo lo pegaba con un inmejorable olor, es la voz de Juantxo Arakama, quien tiene muy interiorizados los rapeos en onda dancehall o reguerianos. No importa lo negra o blanca que sea la música de fondo, el lleva su ideario sin desviaciones.
Arakama: «No sé muy bien qué es lo que nos diferencia, pero ocurre que nuestro formato de banda es una estructura clásico de rock: batería, bajo, dos guitarras y voz. Esto da mucho juego a la hora de hacer música porque, de algún modo, es un formato que no se ve mucho en el raggae-rap. De todos modos, no es premeditado, el formato es así desde el principio».
Este contraste de músicas conglomeradas de fondo y la perseverancia estilística de Arakama convierte a Glaukoma en una banda única en su propuesta. Cabría pensar que esto es inconsistente por la mezcla de estilos, pero el resultado es coherente por la cordura de su vocalista y la sabía fusión realizada por los músicos que le acompañan. No obstante, quizá el resultado fuese otro sin las inspiradas composiciones. Las canciones terminan por derrotar cualquier tentación de tildarles de inconsistentes.
Tampoco cuentan con la típica imagen de grupo rapero. «Hoy en día también se da la coincidencia entre tribus urbanas y estilos musicales, pero sucede que no es el nuestro. Somos de distintos pueblos de Gipuzkoa, ateos y gente normal. No nos identificamos con ninguna tribu», apunta Arakama.
De uno en uno
Pablo Rubio es el batería, residente en Irun. Tuvo alguna experiencia anterior con algún grupo local, pero se puede decir que es su primer proyecto musical serio.
Asier Arandia, bajo, reside en Tolosa. Es el primer grupo en el que participa. Es un escuchante, un músico instruido en la cultura musical. Fanático de Metallica en sus años mozos (y hoy en día), tiene un gran apego hacia el nu metal. En sus ratos libres también es selektah pinchando rap, reggae y dancehall, los estilos que más escucha actualmente. Un bipolar musical.
Jokin Albisua e Iker Pando. Residen ambos en el barrio de Gros, Donostia. Participaron previamente en un proyecto musical llamado Vanilla Motion. Con este grupo ofrecieron cuatro conciertos tocando en su mayoría versiones de thrash metal y algunas canciones propias. Este grupo es el embrión de Glaukoma, ya que es el que más componentes comunes aportará al siguiente proyecto, Glaukoma. Además, Juantxo Arakama consiguió cantar algunas veces con ellos y meterles el reggae-rap en el cuerpo.
Juantxo Arakama, vocal, reside en Tolosa. Es de gustos variados, pero las rimas, el rap y el reggae le han atraído con mayor beligerancia. Es un excelente rapero que además de rimas cuenta con el don de interpretar melodías.
«No nos gusta nada lo que vemos. Vivimos en un mundo muy injusto donde la gran mayoría vive para saciar hasta los topes a una pequéñísima minoría. Esto es así y ha sido así aquí y en todo el mundo, aunque muchos empiecen a darse cuenta ahora, cuando la realidad se nos pone ante los ojos y el futuro es tan incierto»
Disco: «Glaukoma Vol. 1».
Sello: Bonberenea Ekintza.
Grabación: Karlos Osinaga.
Edición: Cedé y elepé..
Destacan: «Itzali ezin», «Whisky vs Fanta, «Ladies & Gentlemen» y «Not paradise». Imaginativa propuesta instrumental y vocal.
Glaukoma es una banda de rap, reggae y dancehall ( y bastante más), pero lo que les diferencia, fundamentalmente, de otros proyectos similares o de parecido origen, es que son un grupo, que no hay bases rítmicas «robadas» ni reiterativas. Aquí las canciones se curran y las toca una banda, además con mucho lustre técnico. Esta circunstancia les permite soltar un solo de guitarra en onda blues sin que lo parezca, un fraseo con mucho de pop camuflado o incluso de metal. Son asimismo muy buenos compositores. Siete temas: siete dianas. Y, además, interpretados por un vocalista muy hábil con la melodía y el rapeo. P. C.