Miembros de la cooperativa Euskal Herria Esnea de Karrantza, que está extendiendo la recogida de leche entre los baserritarras vascos, solicitaron ayer al nuevo Gobierno de Iñigo Urkullu que suspenda el procedimiento sancionador iniciado contra la cooperativa.

El anterior Ejecutivo de Gasteiz inició los trámites para multar con 4.000 euros por etiquetar las cajas de la leche solo en euskera. Idoia Santisteban, baserritarra, Estitxu Garai, responsable de comunicación, y el abogado de la cooperativa, Iñigo Santxo, tacharon de «errónea, maligna y de mala fe» la interpretación realizada por el anterior Ejecutivo de Patxi López.

Garai y Santxo explicaron que Kaiku interpuso una denuncia para que se investigara si la cooperativa cumplía la ley de etiquetado y, tras llevar a cabo la inspección, el Gobierno de Gasteiz abrió un expediente y un procedimiento sancionador, «por una única razón: que la etiqueta de nuestro producto solo aparecía en euskera», precisó Estitxu Garai.

El letrado aseguró que «el Gobierno del PSE, calificando de grave el hecho de etiquetar solo en euskera, nos ha impuesto una multa de 4.000 euros, y en consecuencia la prohibición de etiquetar solo en euskera». La esperanza de la cooperativa se encuentra que con el cambio de Gobierno, el lehendakari Iñigo Urkullu «eche para atrás» este procedimiento porque «es injusto y anule la multa». A juicio de Estitxu Garai, se trata de «un grave ataque al euskera» y «un paso atrás en la normalización de nuestra lengua».