La última emisión del año del programa de La Sexta «Salvados», que conduce Jordi Évole, emitido en la noche del domingo, tuvo como protagonista a Baltasar Garzón, quien en muchos espectadores, especialmente de Euskal Herria, a buen seguro dejó la impresión de que «el juez juzgado», como titularon el programa, hace gala de un morro considerable.

Preguntado por sus procesamientos, y en concreto por la sentencia de la Sala segunda del Tribunal Supremo que le condenó a Garzón a nueve años de inhabilitación, hablaba de «condena política», y añadía que «saben que no tenían que haberme condenado». Probablemente, pero tampoco había motivos para haber condenado a, por ejemplo, tantas militantes vascas (y vascos, claro) procesados por... Garzón. En esos casos seguro que no le parece que haya habido motivación política.

A la pregunta de si «en España se tortura», contestó que «en todos los países se tortura», y en cuanto a la condena del Tribunal Europeo de Derechos Humanos al Estado español por no haber investigado las denuncias de torturas de varios independentistas catalanes, afirmaba que, si bien fueron detenidos por orden suya, la condena al Estado no se refería a él, ya que nadie denunció torturas en su presencia. Sin embargo, una -y en este país somos muchas y muchos más- ha oído y leído muchos relatos de vascas y vascos que han referido torturas ante la indeferencia de ese juez. No obstante, no se cortó un pelo al afirmar que él es «el que desde la Audiencia Nacional más ha peleado» para que no se produzcan esas situaciones.

Por otro lado, se mostraba partidario de una aproximación y diálogo entre el Gobierno español y ETA en el contexto del proceso de paz, y cuando Évole le recordó que Arnaldo Otegi continúa en prisión, Garzón dijo que ahora la situación es diferente, y que haber actuado en la dirección de desactivar la lucha armada es un «mérito que ha de tenerse en cuenta». Resulta que quien ordenó la detención de Otegi y el resto de sus compañeros, cuando trabajaban para llegar a la «situación diferente» que vive este país, fue un señor llamado Baltasar Garzón. ¿O procesó a Otegi y a tantas vascas y vascos e inventó y aplicó el `todo es ETA' con la intención de que les absolvieran? Resulta patético que uno de los que más han contribuido en que la justicia española sea lo que él denuncia se sienta víctima de ella.