Los trenes comenzaron a circular ayer en Durango con normalidad por el nuevo trazado soterrado, en medio del alivio de los vecinos, que confesaron haberse librado del ruido y de los continuos atascos que provocaba el paso de los vagones de Euskotren por el centro del municipio.

Las obras han posibilitado el desdoblamiento de un tramo de vía de casi diez kilómetros y la eliminación de siete pasos a nivel en Iurreta, Durango y Abadiño.

La nueva estación de Euskotren inaugurada en Durango recibió a decenas de curiosos, que destacaron su «luminosidad», pero también la falta de una cubierta en sus más de treinta escalones de acceso.

Hasta la fecha, se han invertido 200 millones de euros y, en los próximos meses, serán destinados otros 32, hasta completar las obras previstas.