Euskal Herria Bildu hizo ayer un llamamiento al resto de partidos políticos e instituciones y a sindicatos y agentes sociales, a «responder como país ahora que todas las alarmas están encendidas». La coalición soberanista afirmó que, «ante la grave crisis y la continua dinámica de recortes, debemos aparcar los intereses partidistas para unir fuerzas» y alertó, además, de que «el auténtico problema son los próximos recortes que están por venir».

En una rueda de prensa celebrada en Donostia en la que participaron Joseba Permach, Rebeka Ubera y Unai Ziarreta, Bildu propuso «levantar un muro de resistencia de la mano de agentes sociales, sindicales y políticos» para hacer frente a «las imposiciones y a los recortes, a la ofensiva neoliberal y a la falta de soberanía».

En este sentido, abogaron por «confrontar con el Estado y desafiar a los ataques del sistema capitalista, haciendo frente con decisiones soberanas a la falta de soberanía económica, cultural y económica», en la línea de «frenar o paliar los efectos sobre las personas de las decisiones que nos llegan de Madrid». Los dirigentes de Bildu hicieron referencia al decreto del Gobierno español para la supresión de la paga de Navidad afirmando que «no afecta solo a los trabajadores de la Diputación o la institución pertinente, sino a toda la ciudadanía, a la que estas personas prestan servicio público». Sobre este tema, pusieron como ejemplo de respuesta la decisión adoptada por el Gobierno foral de Gipuzkoa, que calificaron de «paso fundamental para profundizar en la vía» de hacer frente a las decisiones del Ejecutivo de Rajoy. La coalición abertzale aprovechó el debate que se ha generado sobre este recorte decretado por el Gobierno español para matizar que la paga de Navidad es «mal llamada paga extraordinaria, porque no debemos olvidar que se trata sencilla y llanamente de una parte del total del salario de los trabajadores».

PNV, UPN y Confebask

Partiendo de la base de la grave situación económica, los representantes de Bildu mantuvieron que «es más evidente que nunca que Euskal Herria precisa de su reconocimiento como nación, que requiere de soberanía para desarrollar su marco institucional, su modelo económico, sus sistemas educativos, sanitarios, culturales e idiomáticos». En este contexto, añadieron que «a día de hoy, adoptar sus propias decisiones es para este país algo totalmente trascendental».

Desde la coalición aseguraron que para responder a la crisis «existen dos caminos: por un lado, el modelo que favorece al capital y a las burbujas financieras en perjuicio de los derechos de la ciudadanía» y matizaron que es la senda «en la que suponemos a PNV, UPN o agentes económicos como Confebask».

El segundo camino sería el que plantea Bildu de «tomar decisiones, organizarnos y acumular fuerzas para responder a las necesidades de una sociedad a la que han situado en estado de alarma».