control de armas en estados unidos
Obama apoya la propuesta para limitar las armas de asalto
El presidente de EEUU, Barack Obama, dio ayer su apoyo a la propuesta para limitar la venta de armas semiautomáticas que se debatirá en el Congreso y pidió a su gabinete iniciativas para evitar tragedias como la de Newtown, mientras se multiplican las demandas de ciudadanos, alcaldes y asociaciones de una «acción rápida» para endurecer el control de armas. Incluso la Asociación del Rifle ofreció su «colaboración».
GARA | WASHINGTON
El presidente de EEUU, Barack Obama, se mostró ayer favorable a volver a limitar la compra de rifles semiautomáticos -arma utilizada en la matanza de una escuela en Newtown (Connecticut)- y respaldaría cualquier ley destinada a cubrir posibles vacíos en materia armamentística, según el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, como comprar armas a vendedores privados (en las ferias a las armas, por ejemplo) sin un control previo.
Desde la masacre de Newtown, ocurrida el viernes y en la que fallecieron 27 personas, 20 de ellas niños, Obama ha abogado por adoptar medidas para impedir tragedias de este tipo y pidió a varios miembros de su gabinete que formulen propuestas concretas. Carney confirmó que el presidente respalda los esfuerzos de la senadora demócrata Dianne Feinstein para recuperar el veto sobre las armas de asalto que expiró en el año 2004. En este sentido, advirtió de que «no se ha hecho lo suficiente para resolver el azote de la violencia».
La Casa Blanca, sin embargo, no da plazos para la aprobación de nuevas medidas. Carney afirmó que la intención de Obama es dar pasos «en las próximas semanas».
El debate sobre las armas se ha intensificado en EEUU y, en un sondeo de la CBS, el 57% de los encuestados se declararon favorables a una reforma de la ley sobre armas de fuego, el porcentaje más elevado en diez años. Más de 177.000 personas habían firmado ayer una petición a la Casa Blanca para que endurezca estas leyes y familiares de víctimas de algunas de las masacres que regularmente se producen en EEUU se concentraron ante el Congreso para reclamar «que pare este baño de sangre». Esposas, hijos y amigos de muertos en Virgina Tech, Aurora, Columbine y otras matanzas menos conocidas demandaron «una acción rápida»
Alcaldes de grandes ciudades, como Nueva York, Filadelfia, Chicago, Los Angeles o Sacramento enviaron una carta abierta al presidente y al Congreso para demandar también «una acción inmediata» para prohibir los fusiles de asalto, reforzar los controles, llenar los vacíos jurídicos y endurecer las sanciones para las compras «salvajes» de armas de fuego. «Pensamos que con esta tragedia nacional hemos alcanzado un punto crítico», afirman.
La NRA lamenta la matanza
Los partidarios del mayor control de armas vieron con satisfacción un aparente cambio de mentalidad en algunos miembros de la Asociación Nacional del Rifle (NRA). La propia NRA aseguró que está «preparada para ofrecer una colaboración significativa» para que tiroteos como el de Newtown «nunca vuelvan a ocurrir». «La NRA está compuesta por cuatro millones de padres y madres, hijos e hijas, y por ello estamos asombrados, entristecidos y con el corazón roto por las noticias de los terroríficos y absurdos asesinatos en Newtown», indicó la poderosa organización, que defiende el derecho a portar armas. Pero a la vez, otras voces, como el gobernador de Texas, sostuvieron que los profesores deberían ir armados para evitar estos hechos.
La propuesta de Feinstein espera prohibir la venta, transferencia, fabricación e importación de un centenar de modelos de armas de asalto, así como los cargadores de más de cien balas.
En Newtown, las escuelas -excepto la Sandy Hook- abrieron de nuevo ayer, mientras la ciudad seguía enterrando a los niños muertos en la matanza. Ofrendas improvisadas daban testimonio del dolor en cada calle. En cuanto a la investigación, la Policía afirmó que será larga y reveló que autor de la masacre, Adam Lanza, borró el disco duro de su ordenador para evitar dejar pistas. Añadió que mató de cuatro disparos en la cabeza a su madre, Nancy Lanza, cuando dormía.
Cuatro personas -dos hombres y dos mujeres con vínculos familiares- fueron halladas sin vida en una vivienda del estado de Colorado tras un tiroteo. Entre los fallecidos figuraría el presunto autor de los disparos, que aparentemente se habría suicidado.