GARA > Idatzia > Ekonomia

Orkestra pide interconectar conocimiento e industria para generar competitividad

Orkestra considera que ha llegado el momento de que los centros tecnológicos se interconecten con la industria para conseguir la competitividad necesaria. Sostiene que «tenemos infraestructuras, tenemos buenos equipos e industria, pero no están conectados».

p021_f01.jpg

Juanjo BASTERRA |

Orkestra, Instituto Vasco de Competitividad, ha presentado el libro «Estrategias para la construcción de ventajas competitivas regionales. El caso del País Vasco» que, como dijo Mari Jose Aranguren, directora de Investigación del instituto, es un «marco de reflexión» porque «las diferencias entre territorios no están en las grandes estrategias, sino en cómo se abordan».

Tras realizar un recorrido por la evolución de la economía productiva vasca, Aranguren expuso que ha habido una «alta intervención del Gobierno Vasco en las políticas industriales y de competitividad». Desde los años ochenta del siglo pasado «donde se perdía renta per cápita, hasta hoy que somos uno de los grupos de referencia en renta per cápita en Europa se ha avanzado». Las infraestructuras, los investigadores y las empresas están, pero a juicio de Orkestra se debe producir una interconexión que es por donde caminan otros países avanzados y «nosotros no hemos tomado esa senda todavía», dijo.

Junto a Edurne Magro y Mikel Navarro, investigadores de Orkestra, a los que se incorporó un poco más tarde Jesús Mari Valdaliso, catedrático de Historia e Instituciones Económicas de la UPV-EHU, Aranguren mantiene que en la actualidad se debe producir «esa otra gran transformación» que, «igual que en las décadas preferentes no puede quedar en manos del mercado porque correríamos el riesgo de especializarnos en exceso» y bloquearía esa «interconexión necesaria del conocimiento con la industria».

Porque, como explicó la directora de Investigación de Orkestra, la apuesta por la industria como motor económico «nos ha permitido estar en mejor posición y ha traccionado mucha actividad, mucha formación y una amplia base industrial de red de proveedores». Igual que antes, se debe «mejorar el tamaño» y, a la vez, «la política de innovación debe incidir en la demanda, porque tenemos oferta».

Mikel Navarro fijó claves de futuro para las que dijo que «estamos preparados» y advirtió de que «nos debemos preocupar más por el modo de la intervención». Según los datos que ofreció «hay mucha oferta de investigadores, pero no se impulsa la diversificación. Tenemos 70 bioempresas de un total de 180.000 que hay en conjunto, pero hay que conseguir que la máquina herramienta se diversifique». Porque «nuestras empresas de nanotecnología traccionan más con empresas alemanas que con las de aquí». Esta realidad sonó dura. Por eso, Navarro matizó «hay que redireccionar esa producción. Se ha hecho bien, pero se debe explotar esos buenos resultados individuales en el País Vasco. Se debe producir un uso eficiente de los recursos».

Un factor que debe variar, según Mikel Navarro, es que el desarrollo de la investigación se hace de arriba hacia abajo «pero no llega a las pymes por debajo de cincuenta trabajadores». Por lo que dijo que se debe interactuar en sentido contrario». Porque, como añadió Edurne Magro, «se deben alinear las políticas con la estrategia» y «avanzar precisamente en planes horizontales».

En Europa, en estos momentos se incide en estrategias de especialización inteligente. «La competitividad está en mezclar sectores. Hay que hacer combinaciones, por ejemplo de máquina herramienta y la biotecnología».

Aunque reconocieron que ante las altas tasas de paro, las prioridades «deben compensarse», pues a juicio de estos investigadores, «no se puede dejar la innovación de un lado», si bien admitieron «que para hacer frente al desempleo no se podrá hacer como hasta la fecha. Habrá que adoptar nuevas palancas», remarcaron.

Edurne Magro insistió en que esa estrategia «debe configurarse en torno a las necesidades de nuestro territorio», pero como añadió Mikel Navarro «tiene que haber continuidad y se debe acelerar el paso». Porque como terminó Mari Jose Aranguren «debemos colaborar, no pensar en la competencia».

FUTURO YA

Europa incide ya en estos momentos en estrategias de especialización inteligente. «La competitividad está en mezclar sectores y empresas». Por ejemplo, interactuar entre empresas de máquina herramienta y empresa de biotecnología.

Intervención

La trasformación que debe llegar se debe construir con una estrategia donde la intervención pública debe ser sólida, porque si se queda solo en manos del mercado «correríamos el peligro de especializarnos en exceso», dijo Mari Jose Aranguren, directora de Investigación.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo