Amaiur preguntará al Congreso si autorizó escuchas en su oficina
Amaiur quiere saber si la Mesa del Congreso autorizó escuchas en sus despachos de la Cámara Baja española. Tras la publicación por parte del diario «El Mundo» de informaciones que podrían incluir conversaciones privadas mantenidas en el interior de las dependencias parlamentarias, la coalición abertzale estudia varias medidas para saber si han sido espiados.
Alberto PRADILLA |
Amaiur presentará una pregunta por escrito a la Mesa del Congreso español para conocer si autorizó escuchas en las oficinas de la coalición abertzale en Madrid. El órgano rector de la Cámara Baja es el único que puede dar el visto bueno a la intervención de las comunicaciones en el lugar de trabajo de los aforados. Esta es la primera de las iniciativas que prevé llevar a cabo el grupo independentista después de que conversaciones privadas mantenidas en sus despachos apareciesen filtradas al diario «El Mundo», tal y como reveló ayer GARA. Tampoco se descarta tomar otro tipo de medidas como presentar una denuncia judicial.
La diputada Maite Aristegi, en una comparecencia celebrada ayer en Iruñea para valorar el primer año del Gobierno del PP, aseguró ayer que Amaiur dispone de «indicios bastante claros» de que los miembros de la coalición han sido sometidos a escuchas en sus despachos. Calificó los hechos como de «muy serios» y señaló que todavía están analizando cuáles serán sus próximos pasos.
El primero será presentar un escrito a la Mesa del Congreso, presidida por Jesús Posada, ya que este es el único órgano que podría conocer o haber dado el visto bueno a las escuchas en las dependencias de la coalición abertzale. Si las sospechas de Amaiur se confirmasen, se trataría de un caso de espionaje en los despachos de cargos electos.
La versión de «El Mundo»
La publicación, el pasado 21 de diciembre, por parte del diario «El Mundo» de una información sobre una de las asistentes de Amaiur evidenció la posibilidad de que el rotativo de Pedro J. Ramírez hubiera tenido acceso a conversaciones mantenidas en el interior del despacho. Previamente, el mismo periódico ya había elaborado un reportaje acerca de esta misma persona, a quien se le acusaba de ejercer como «topo» de la iniciativa Rodea el Congreso, también conocido como 25S. Según el relato de «El Mundo», la trabajadora habría facilitado a los activistas información sobre la agenda parlamentaria. Este intento de criminalización fue denunciado en su momento no solo por la coalición independentista, sino por miembros de otras formaciones.
Sin embargo, los hechos no terminaron ahí. Este primer artículo fue comentado por los diputados de Amaiur, así como por representantes de otros partidos. Estas conversaciones, mantenidas en tono distendido, es lo que ahora parece haber sido filtrado a «El Mundo». De hecho, los diputados han identificado diálogos mantenidos en el interior de las dependencias ubicadas en el Congreso. El rotativo español, sin embargo, los presentaba como comentarios realizados en el «entorno radical», sin dar más detalles.
Por el momento, ni el Gobierno español ni el Congreso se ha pronunciado sobre las posibles escuchas a Amaiur.
Además de la falta de voluntad de diálogo mostrada por el Gobierno del PP, Sabino Cuadra consideró que si algo ha caracterizado este año ha sido «la aplicación más descarnada de las más graves medidas antisociales diseñadas desde los grandes poderes europeos e internacionales: Banco Central Europeo, Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional y Unión Europea». El diputado independentista consideró que el papel del Gobierno español ha sido el de «títere en esta cuestión», ya que «le ha tocado dirigir ese proceso en el Estado». En este sentido, Cuadra denunció que las políticas de austeridad puestas en marcha por el Ejecutivo de Mariano Rajoy «están suponiendo una involución en los derechos sociales y económicos, recortando los logros alcanzados tras varias décadas de luchas obreras, sociales y populares». Cuadra también hizo referencia a la situación en Nafarroa, donde censuró que UPN «se ha convertido en el aliado más fiel, sumiso y prácticamente único del PP en la aprobación de sus presupuestos antisociales y recortes», llegando incluso a desobedecer los mandatos del Parlamento de Iruñea. A.P.
«El miedo, la duda o la desconfianza son legítimas. Por supuesto. Pero eso no es motivo para seguir indefinidamente anclados al pasado y al inmovilismo, eludiendo continuamente la responsabilidad. Y más, cuando la coyuntura requiere de valentía, coraje y determinación». Así definió ayer el diputado Sabino Cuadra la actitud mostrada por el Gobierno del PP durante su primer año en Moncloa. Según denunció el electo independentista, la derecha española se ha caracterizado por su «rechazo al diálogo» y la aplicación de recetas del pasado como la aplicación de la doctrina 197/2006 o las insistentes amenazas de ilegalizar Amaiur o EH Bildu. Frente a ello, Cuadra abogó por abordar un diálogo «con madurez». A.P.