Los seis votos favorables del grupo municipal del PSE en el Ayuntamiento de Gasteiz permitieron ayer que saliera adelante una moción, que PNV y Bildu llevaron a pleno, que solicita la puesta en libertad de los presos gasteiztarras Gotzone López de Luzuriaga y José Ramón López de Abetxuko, que padecen graves enfermedades.

La moción contó con el respaldo de 18 ediles de los 27 que conforman la Corporación, ya que solo el PP (al frente del Gobierno municipal) votó en contra. Según precisó este grupo en el turno de explicación del voto, el PP considera que esta es cuestión que corresponde dilucidar a los jueces y no al Ayuntamiento, que «no es el foro adecuado».

23 años en prisión

El texto aprobado por la mayoría de la Corporación incorporó, a petición del PSE, una referencia expresa al cumplimiento de «los términos establecidos en la legislación vigente», al tiempo que apela a «razones humanitarias» para solicitar la liberación de López de Luzuriaga y López de Abetxuko.

El representante de Bildu Kike Fernández de Pinedo destacó que ambos presos, que llevan más de 23 años en la cárcel, padecen «graves casos de excepcionalidad» como «la dispersión, el hecho de que deberían estar en la calle por haber cumplido las tres cuartas partes de su condena y que se trata de presos gravemente enfermos».

El edil independentista recordó que hace más de un año que ETA abandonó la lucha armada, «por lo que el actual momento político, en el que se han dado pasos como el reconocimiento de todas las víctimas, hace más grave su situación».

El concejal del PNV Alvaro Iturritxa resaltó, por su parte, que la aplicación de la «doctrina Parot» supone para ambos presos una acumulación de penas que «desde todo punto de vista y también desde los organismos internacionales, está sancionada y considerada una irregularidad». Además, señaló que en el actual momento «es necesario dar pasos en la dirección adecuada desde las instituciones para evitar el castigo añadido».

Política de gestos

El portavoz del grupo municipal del PSE, Patxi Lazcoz, compartió que tras el anuncio de cese de la actividad armada «nos encontramos en un momento político y social distinto», en el que defendió la necesidad de «dar pasos hacia adelante». Precisamente, enmarcó el acuerdo plenario de ayer en una política «de gestos» que «ponen de manifiesto su voluntad para que no se vuelva a repetir en la historia que la violencia tenga ningún tipo de legitimación ni política ni social, ni institucional».

En el turno popular, en representación de la iniciativa ciudadana, Elo Mayo destacó la «amplia pluralidad» de las adhesiones y el «claro compromiso con los derechos humanos y en contra de la privación de libertad de dos personas gravemente enfermas».

Recordó que Gotzone López de Luzuriaga padece un cáncer de mama de tipo uno, con tratamiento de radioterapia y aparición de distintas patologías, «algunas asociadas al tratamiento que recibe». José Ramón López de Abetxuko, por su parte, sufre una cardiopatía «agravada por la aparición de otras enfermedades tras su prolongada estancia en prisión».