¿Para qué cambiar lo que marcha bien? Son 11 victorias las que acumula el Caja Laboral Baskonia tras el sopapo recibido en noviembre ante Zalgiris Kaunas. Tras un diciembre afortunado y mágico a partes iguales, el cambio de año ha atrapado a los pupilos de Zan Tabak camino del Nokia Arena, más conocido como «La mano de Elías», para disputar ante el Maccabi de Tel Aviv la segunda jornada del Top 16 de la Euroliga y tratar de afianzar el buen inicio de esta segunda fase, «robando» una victoria en uno de los pabellones más emblemáticos del baloncesto FIBA.

«Ahora es el momento de apretar a los jugadores», recordaba Zan Tabak tras el duelo ante Fuenlabrada, y también que «el equipo ha enseñado que es capaz de realizar grandes cosas, pero cualquier conjunto que aspira a hacer algo, debe hacer grandes cosas siempre, no una vez cada tanto». El preparador de Split explicaba que «la diferencia entre la defensa ante Olympiacos y ante Fuenlabrada, dos equipos que juegan de forma muy parecida, fue solo de mentalidad», de modo que espera que los suyos muestren ante el Maccabi la mejor de sus disposiciones.

Y es que el propio Maccabi no parece el ogro de otras campañas. Notarán la ausencia por lesión de Nik Caner-Medley -mientras, Causeur se ha recuperado de su golpe en el cuádriceps- y además, los de David Blatt afrontan esta segunda jornada del Top 16 con una derrota a cuestas: la cosechada ante el Montepaschi Siena en la primera jornada por 79-69.

«Es una cancha muy linda para jugar en la que he ganado dos veces», recordaba Andrés Nocioni antes de partir hacia Tel Aviv. «A pesar de que hayamos tenido poquito descanso, nos vendría muy bien el triunfo, después de un 2012 raro que al menos terminó bien», reflexionaba el jugador de Santa Fe.

Lampe, MVP de diciembre

Mientras, Maciej Lampe se enfrenta a uno de sus exequipos. El pívot polaco militó en la escuadra macabea en la temporada 2009/10, aunque luego sería traspasado al Unics Kazan de Rusia, donde ofrecería su mejor rendimiento.

Un rendimiento que parece ir a mejor, ya que acaba de ser designado jugador del mes de diciembre por la Euroliga. «Todo tiene que ver con la confianza, creo que al principio de temporada nuestra moral estaba un poco baja. Ahora somos un equipo completamente distinto y estamos jugando un estilo de baloncesto diferente», declaraba en la previa al duelo de hoy.

En opinión de Lampe, la forma de llegar lejos esta temporada depende «de la química de grupo. Los equipos que permanezcan unidos y jueguen mejor juntos serán los más peligrosos. Si hacemos esto podemos ganarlo todo. Nuestro objetivo es ir a Londres», aseguraba.