Presentación
El Cross de Reyes quiere recuperar el toque internacional
Atletas de seis estados competirán el domingo en el barrio donostiarra de Gros.
Miren SÁENZ
El Cross de Reyes, la carrera más antigua de Euskal Herria, afrontará el domingo su 83ª edición y la tercera desde que los organizadores de la Gimnástica de Ulia decidieron unificar las pruebas absolutas y abrirlas además a los populares. Esperan a 300.
El presidente de la sociedad donostiarra Mikel Sainz de Baranda adelantó los detalles ayer en la habitual presentación en la sede de la Gimnástica, respaldado por el presidente de la Federación Atlética Guipuzcoana, Mikel Odriozola, el marchador que ahora vive el atletismo también desde los despachos.
«Pese a la reducción del presupuesto, se ha hecho un esfuerzo importante. Habrá atletas de seis países distintos, algunos olímpicos o campeones nacionales. Pretendemos así recuperar poco a poco el carácter internacional», señaló Baranda. Con un 30% menos de presupuesto que en la anterior edición, han logrado estirar los 10.000 euros del montante y mantener los premios en metálico destinados a los cinco primeros clasificados con 1.000 euros tanto para el vencedor masculino como para la femenina. Por ellos pelearán unos cuantos atletas que se han dejado ver estos días en las recientes San Silvestres.
Bajo la luz de las antorchas que iluminaron el Circuito de Nochevieja, Sergio Sánchez superó el lunes a ocho africanos, entre ellos al keniata Emmanuel Kipsang, que le secundó en el podio de Galdakao, o al marroquí Anouar Dabab, cuarto, con los que el domingo volverá a coincidir en Donostia.
Largos y cortos
Si los 10 kilómetros le quedan un pelín largos al leonés -centrado en el 5.000 y brillante en el 3.000-, al etíope Etana Teshome Gelana, con buenos puestos en maratón y un registro de 2:07, se le van a hacer cortos.
Su compatriota Baisa Moleta, víctima del alavés Iván Fernández en la última carrera del año en Gasteiz, el portugués Hugo Pinto y la media docena de marroquíes curtidos en el asfalto serán otras alternativas. Uno de ellos, Rachid Nadij, que tiene nacionalidad española, compartirá carrera con su mujer Malika Asahssah que aspira a su cuarto triunfo en el barrio de Gros.
Como en 2012, Tirhas Gebre parece su única amenaza. Las dos están finas. Asahssah venció el lunes al mediodía en Beasain y por la tarde quedó tercera en el Circuito de Nochevieja donde ganó Gebre. La etíope, afincada en Donostia, cuenta sus últimas intervenciones por victorias: Burlata, Getxo y Galdakao. Su compatriota Waka, la obstaculista portuguesa Clarisse Cruz, la marroquí El Mehdi y la keniata Ayela pujarán por los primeros puestos femeninos.
El premio al mejor atleta guipuzcoano, cuyo trofeo es una talla de madera, podría ser para el eibartarra Asier Cuevas o el elgoibartarra Alberto Revuelta. Con Imanol Cruz y Esparza sobran candidatos, algo que no ocurre entre las mujeres. Aunque la inscripción se cierra el sábado ayer no había una favorita.
Mañana y el sábado se podrán recoger los dorsales en la sociedad Gimnástica de Ulia, ubicada en la calle Trueba 12. El domingo alevines e infantiles (1.830 metros) abren la jornada a las 10.30; a las 11.00 será el turno de cadetes y juveniles (4.410 m.) y a las 11.45, la prueba absoluta de 10.000 m. de recorrido.
La Fundación Síndrome de Dravet pretende recaudar 8.000 euros con distintas iniciativas, destinados a financiar 80 test genéticos que faciliten el diagnóstico de una enfermedad de las consideradas raras. Los atletas que deseen colaborar podrán aportar 1 euro más en la inscripción.