La portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Victoria Nuland, admitió ayer tener contacto con «los venezolanos de todas las tendencias políticas», sin especificar nada más, pero negó cualquier injerencia de Washington en un momento delicado marcado por la situación del presidente venezolano, Hugo Chávez, y aseguró que «cualquier transición política en Venezuela debe ser el resultado de decisiones tomadas por los venezolanos». Mientras, el estado de salud de Chávez sigue siendo motivo de incertidumbre no solo en Venezuela y América Latina en su conjunto, sino en todo el mundo, y pone en duda su investidura, prevista para el 10 de enero.

«El mensaje que enviamos a los venezolanos desde todas partes es que cualquier transición debe ser democrática, constitucional, abierta, transparente y legal dentro del sistema de Venezuela, y decidida por los venezolanos», afirmó Nuland.

Por su parte, el coordinador de la coalición opositora venezolana Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Ramón Guillermo Aveledo, pidió al Gobierno, en una entrevista radiofónica, que acceda al «reemplazo temporal» del mandatario, tal como establece la Constitución, pero aclaró que la oposición no pretende «asaltar el poder» aprovechándose de la delicada salud de Chávez sino que solo demanda el cumplimiento de la Carta Magna.

Aveledo solicitó al Ejecutivo que informe «con claridad» sobre el estado del líder de la revolución bolivariana. «Hay que saber el estado de salud exacto del presidente», reclamó el secretario de la MUD, antes de pedir «la verdad verdadera» sobre lo que ha calificado de «problema nacional».

Aseguró que Gobierno «no asume la realidad» e insistió en que la propuesta de la MUD «no implica una sustitución del presidente, sino su reemplazo temporal», habida cuenta de que «no está ejerciendo».

El dirigente opositor reconoció que la «prioridad» para Chávez es recuperarse de la operación a la que fue sometido, pero apeló a la «responsabilidad» de «darle al país soluciones transitorias o permanentes» para que «se preserve la voluntad de los venezolanos».

Después de que el presidente boliviano, Evo Morales, dijera el miércoles que el estado de Chávez es muy preocupante y el vicepresidente y canciller venezolano alabara su fortaleza, el ministro de Ciencia y Tecnología y yerno del mandatario bolivariano, Jorge Arreaza, indicó en su cuenta de twitter que Chavéz permanece «estable» dentro de su cuatro médico «delicado».