El portavoz del PSE, José Antonio Pastor, destacó que «no es a la Ejecutiva de Álava a la que corresponde fijar la política de alianzas» del partido, en respuesta al secretario general de la formación en Araba y del grupo parlamentario, Txarli Prieto.

En declaraciones a la agencia Efe, Pastor se refirió a los problemas internos del PSE en Araba y a la polémica mantenida por su secretario general, Txarli Prieto, y su antecesor en el cargo, el expresidente del Senado español Javier Rojo, sobre las alianzas políticas del partido.

Después de que Prieto presentase la ponencia política que el PSE de Araba debatirá en su congreso provincial del 17 de febrero, en la que se aboga por el «entendimiento con la izquierda», Rojo declaró que «el destino de los socialistas vascos no puede ser pactar con la izquierda abertzale porque las coaliciones que la representan necesitan un purgatorio largo».

De este modo, Prieto abría la puerta a la posibilidad de alcanzar acuerdos con EH Bildu siguiendo la vía abierta con el acuerdo presupuestario en Gipuzkoa y consideraba un error la decisión del PSE de permitir al PP gobernar la Diputación de Araba. «Todas las investiduras de derecha son un error», destacó el secretario general del PSE en Araba.

Prieto reiteró ayer que en política de alianzas el PSE debe abogar por «acuerdos de izquierda, progresistas» y censuró que «algunos reclamen el debate de las ideas y después se asusten con ellas».

Pastor admitió que en Araba «hay un problema de cierta división interna entre la actual dirección y otro grupo de compañeros que no están de acuerdo con la dirección y plantean una alternativa para el congreso».

Dijo que la opinión de Prieto sobre pactos «es muy respetable, pero la política de alianzas y pactos en el PSE corresponde en exclusiva al Comité Nacional de Euskadi».«No corresponde a ningún territorio. Por tanto, hay que entenderlo desde una opinión personal, cualificada, pero no deja de ser esto», añadió sobre las palabras de Prieto.

El portavoz del PSE confió en que las «legítimas diferencias» que han aflorado en el seno del partido en Araba se expongan en el próximo congreso de febrero «sin que eso provoque una fractura interna ni personal» y consideró que la formación saldrá reforzada de esta situación.