El preso mapuche preso Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), una organización indígena implicada en el conflicto por la recuperación de las tierras ancestra- les del pueblo mapuche en Ngulu Mapu (territorio mapuche bajo administración de Chile) fue trasladado ayer de la prisión de Angol a la de El Manzano, en Concepción, como represalia, aunque las autoridades esgrimieron «motivos de salud».

Llaitul cumple hoy 54 días en huelga de hambre, protesta que inició junto a su compañero Ramón Llanquileo, para denunciar haber sido doblemente condenado por tribunales civiles y militares, la aplicación en su caso de la pinochetista «Ley Antiterrorista» y el uso de testigos protegidos en el juicio al que fue sometido.

La CAM denunció que el traslado «es una medida de represión» por el atentado del viernes en Vilkún, donde murieron un empresario agrícola y su esposa.

Cecilia Huenupi, portavoz de la CAM señaló que la «Gendarmería (guardia de prisiones) anunció que Héctor tenía problemas de salud cuando lo trasladaron, pero él no se encuentra con mayores problemas».

Agregó que es la manera que la Gendarmería tiene «de responder al conflicto que se generó con la quema del fundo de Luchsinger (el empresario fallecido)».

El director regional de Gendarmería, Eleuterio Cofré, declaró a la Televisión Nacional que «las razones de este traslado son todas médicas y porque en Angol no hay hospital como el que existe en Concepción» y quiso desmarcar el hecho de lo sucedido en Vilkún.

La Gendarmería no precisó cuánto tiempo permanecerá Llaitul en la enfermería del penal de Concepción.

En la madrugada del viernes, una veintena de encapuchados prendieron fuego a una vivienda en el fundo Lumahue, situado cerca de Vilkún, en Ngulu Mapu. Según el ministro chileno del Interior, Andrés Chadwick, en el lugar de los hechos se hallaron panfletos alusivos a la muerte del joven estudiante mapuche Matías Catrileo, al que un carabinero mató en 2008 en un predio de la familia Luchsinger.

Chadwick señaló ayer que «enfrentamos un enemigo fuerte, poderoso, organizado, en La Araucanía. Enfrentamos a organizaciones terroristas».

El territorio mapuche, Wallmapu, se extiende dentro de las fronteras de Argentina y Chile. En Ngulu Mapu (La Araucanía chilena), viven unos 600.00 mapuches que ocupan unas 600.000 hectáreas, un 5% de las tierras heredadas de sus familiares y una sexta parte de lo que poseen las compañías forestales, sin contar las que les han sido arrebatadas por los empresarios agrícolas.