Cabello tras su reelección: «Chávez es presidente ahora y después del día 10»
El presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, fue ratificado ayer como jefe del Legislativo en un acto en el que prometió que el mandatario venezolano, Hugo Chávez, seguirá siendo el jefe de Estado más allá del 10 de enero aunque no pueda cumplir con la asunción de su cargo en esa fecha. El vicepresidente, Nicolás Maduro, ya había dicho horas antes que la investidura, cuya fecha consideró una formalidad, puede retrasarse.
GARA | CARACAS
El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello, reelegido ayer en el cargo, afirmó que el jefe de Estado, Hugo Chávez, fue elegido en los comicios del 7 de octubre y seguirá dirigiendo el país más allá del 10 de enero, fecha fijada para la toma de posesión presidencial. «Hugo Chávez Frías fue electo para ser presidente de la República y seguirá siendo presidente de la República más allá del día 10 de enero, no le quede duda a nadie, bien claro, a nadie le quede duda de eso», subrayó Cabello durante un discurso tras ser ratificado, sin margen para la sorpresa, como presidente del Legislativo unicameral durante la inauguración ayer del nuevo periodo de sesiones de la Asamblea Nacional.
Cabello señaló que Chávez «disfruta de un permiso de acuerdo con la Constitución (...). Y haremos que ese permiso sea cumplido», agregó.
Permiso de la Asamblea
Chávez recibió permiso de la Asamblea Nacional para ausentarse del país por más de cinco días antes de viajar a Cuba, donde fue operado el 11 de diciembre por cuarta vez del cáncer que le fue diagnosticado hace 18 meses en la zona pélvica, y donde permanece hospitalizado desde entonces. El mandatario sufre una insuficiencia respiratoria como consecuencia de una severa infección pulmonar, lo que pone en duda que pueda estar en Caracas el 10 de enero y ha desatado todo tipo de conjeturas sobre lo que sucedería entonces.
Sin sorpresas, la «mayoría evidente y contundente» de los 97 diputados del gobernante PSUV (de los 165 escaños totales), en las propias palabras de Cabello, el presidente de la Asamblea Nacional fue ratificado hasta el 2014 al frente de una directiva copada completamente por el oficialismo.
Cabello juró el cargo en una sesión convertida en homenaje y declaración de respaldo a Chávez, en la que aseguró que el líder de la revolución bolivariana seguirá siendo el presidente del país después del 10 de enero.
Su declaración ratificaba el anuncio realizado el viernes (madrugada de ayer en Euskal Herria) por el vicepresidente venezolano, Nicolás Maduro, de que si en cinco días Hugo Chávez no puede cumplir con el «formalismo» de jurar el cargo, debido a su delicado estado de salud, lo hará posteriormente ante el Tribunal Supremo.
«Falta absoluta»
Esa es la solución que ha encontrado el chavismo en la falta de previsiones de la Constitución para la situación que ha generado la enfermedad del presidente y que de hecho había generado una gran expectación alrededor del acto de elección de la Junta Directiva ayer en el Parlamento.
De acuerdo con la Constitución, si se produjera la «falta absoluta» de Chávez el día 10 de enero Cabello debería asumir la Presidencia del país mientras se celebran elecciones en 30 días.
«No es el 10 de enero lo que establece si el presidente esté en falta absoluta o falta temporal; no tiene nada que ver», aseguró ayer Cabello, al rechazar esa posibilidad como también lo hizo Maduro la noche anterior.
La Constitución es clara con respecto a la falta absoluta de un presidente electo, pero no en el resto de circunstancias que impidan su presencia en la toma de posesión.
Cabello indicó que la oposición «puede darle la vuelta que quiera», pero «el 10 de enero jamás ni nunca se convertirá en un espacio para que la voluntad popular del pueblo en la calle del 7 de octubre sea vulnerada».
«Deberíamos estar todos luchando, todos, para que no sea así», agregó.
La oposición rechazó que el oficialismo convirtiera la sesión de ayer en un acto de «reparto de cuotas de un partido» y tachó de «intolerante, sectario y excluyente» al PSUV, acusaciones que rechazó Cabello, quien aseguró que «la Asamblea es un escenario para el debate, pero no para la negociación».
En un acto posterior con seguidores chavistas a las afueras del Parlamento, Maduro dijo que el tratamiento que sigue Chávez merece tranquilidad.
Miles de seguidores de Hugo Chávez se concentraron en el centro histórico de la capital, frente a la sede de la Asamblea Nacional, donde cantaron «no se va y no se va, el comandante no se va» y corearon «pa'lante comandante».
Miles de venezolanos se apostaron frente a la Asamblea Nacional en señal de respaldo a la Revolución Bolivariana y a su líder, el presidente, Hugo Chávez, así como a los diputados del PSUV en el Parlamento venezolano.