Cabello anuncia actos populares y no descarta que Chávez regrese el jueves
El presidente de la Asamblea de Venezuela, Diosdado Cabello, anunció ayer la convocatoria de una gran movilización para el jueves, fecha prevista para la toma de posesión del presidente electo, Hugo Chávez, y no descarto que el propio Chávez regrese al país. Cabello y el vicepresidente, Nicolás Maduro, advirtieron a la oposición de que recibirá «una lección histórica» si lleva a cabo un paro a partir de ese día.
GARA | CARACAS
El próximo jueves tendrá lugar una gran manifestación en apoyo al presidente venezolano, Hugo Chávez, en el día previsto para que tomara posesión del mandato 2013-2019 tras su victoria en las elecciones del 7 de octubre, según anunció ayer el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello.
Cabello hizo un llamamiento a «una gran manifestación en Caracas el día 10 de enero frente al palacio de Miraflores para apoyar masivamente a nuestro presidente», en presencia de numerosos jefes de Estado de países amigos», y para «dar una derrota contundente a quienes quieran desestabilizar el país», en una alusión al «paro cívico» que han comenzado a reclamar algunos sectores opositores.
Al ser preguntado por si el propio Chavez podría estar presente, respondió que «no descartamos absolutamente nada». Añadió que se celebrará otro acto en el Teatro Teresa Carreño y que «vienen a Venezuela una cantidad de presidentes de países amigos, jefes de gobierno y primeros ministros de algunos países. Van a visitarnos, a darle su solidaridad al presidente Chávez y al pueblo».
El Gobierno venezolano estima que Hugo Chávez podrá prestar juramento ante el Tribunal Supremo cuando se lo permita su salud y considera la fecha del 10 de enero como una formalidad. La oposición se agarra a esa fecha para argumentar que la falta de asunción de un nuevo gobierno implicaría que Cabello tendría que asumir la Jefatura de Estado, un supuesto que la Constitución reserva para la «falta absoluta» del candidato electo. Cabello insistió en que no se cumplen los criterios establecidos para ese supuesto. Además, la procuradora general de Venezuela, Cilia Flores, afirmó que el hecho de que el mandatario del paí sea un presidente reelecto y no un candidato electo marca «una gran diferencia» a la hora de interpretar el artículo de la Constitución que regula la toma de posesión de la Presidencia.
Cabello dijo que «hay un grupo de personas naturalmente disociadas que quieren imponer su criterio, una minoría que no ha querido entender lo que esta ocurriendo en Venezuela y que cree que el 10 de enero es para ellos un 11 de abril», en alusión al golpe de Estado contra Chávez de 2002.
Empresarios e iglesia católica
El vicepresidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y varios ministros advirtieron a empresarios del sector de la alimentación que no se permitirá el desabastecimiento, después de denunciar supuestos actos de acaparamiento. Maduro advirtió de que la oposición recibirá una «lección histórica» si se concretara una huelga que han comenzado a convocar opositores residentes en EEUU a partir del día 10.
En ese contexto, ha intervenido la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) criticando al Gobierno y alertando de un «grave riesgo» para la estabilidad del país. El presidente de la CEV, Diego Padrón, arzobispo de Cumaná, rechazó «categóricamente todo posible intento de manipulación de la Constitución».
Por otra parte, más de 2.200 firmas en 90 países se han sumando al manifiesto de la Red de Intelectuales, Artistas y Luchadores sociales en Defensa de la Humanidad, que hace votos por la plena recuperación de la salud de Chávez.
Entre ellos figuran el premio Nobel argentino Adolfo Pérez Esquivel, la pacifista Cindy Sheehan y el actor Danny Glover, ambos de EEUU, al teólogo brasileño Frei Betto, al español Ramón Chao, los poetas Roberto Fernández Retamar, de Cuba, y Thiago de Melo, de Brasil, y el escritor venezolano Luis Britto.