Los cubanos pueden ya viajar al exterior sin permiso del Gobierno
Por primera vez en medio siglo, los cubanos podrán viajar al exterior sin la autorización del Gobierno. La reforma migratoria que ayer entró en vigor elimina el permiso de salida y la carta de invitación que necesitaban para salir de la isla. Además, amplía el plazo de estancia en el extranjero de 11 a 24 meses para no perder los bienes y la posibilidad de regresar. El Ejecutivo advirtió de que tomará medidas para «preservar el capital humano creado por la Revolución».
GARA | LA HABANA
Con la entrada ayer en vigor de la reforma migratoria anunciada el 16 de octubre, los cubanos ya no necesitarán el permiso del Gobierno, conocido como «tarjeta blanca», ni una carta de invitación para poder viajar al extranjero. Solo deberán tener el pasaporte en regla, por lo que la Dirección de Inmigración y Extranjería ha habilitado 195 oficinas para agilizar la tramitación de este documento, cuyo coste rondará los 80 dólares. Además, quienes viajen podrán estar en el extranjero un máximo de 24 meses sin perder sus bienes en la isla y la posibilidad de retorno. Cuando excedan este término deberán hacer constar en el pasaporte las prórrogas correspondientes, otorgadas por un consulado cubano. Hasta ahora, el plazo era de once meses.
No obstante, la nueva Ley de Migración prevé algunas excepciones por «motivos de interés público», de «defensa» o de «seguridad nacional». El Ejecutivo de Raúl Castro ya anunció que tomaría medidas para «preservar el capital humano creado por la Revolución» y evitar el «robo de cerebros» y deportistas por parte de EEUU, entre otros países.
La Habana todavía no ha divulgado la lista de profesionales «vitales», a quienes se les seguirá exigiendo ciertos requisitos, pero la semana pasada varios médicos comentaron a AFP que, según les habían notificado, no figuraban en ese listado. «Los médicos fuimos informados de que no tenemos que solicitar autorización del ministro (de Salud) para salir del país, sino que lo podremos hacer como cualquier otro ciudadano», declaró un médico de un hospital de La Habana, que pidió mantener el anonimato.
Cuba tiene en la actualidad más de 70.000 médicos y es el país con mayor cantidad de galenos en relación a la población, según la organización Médicos sin Fronteras: uno por cada 170 habitantes. El Estado francés tiene uno por cada 300 habitantes, EEUU uno por cada 390 y Tanzania uno por cada 50.000.
La reforma también beneficia a casi dos millones de emigrados cubanos, que ya no tendrán que hacer largos trámites para visitar Cuba, incluidos los deportistas y profesionales que, aprovechando giras por el extranjero, decidieron no volver. Los emigrados podrán regresar a la isla durante un periodo de hasta 90 días, 60 más que lo establecido anteriormente. El Gobierno de Raúl Castro también ha ampliado las posibles causas de repatriación incluyendo, por ejemplo, a aquellos que dejaron Cuba por razones humanitarias.
Un paso más
En su edición de ayer, el diario oficial «Granma» remarcó que «Cuba ha dado un paso más para lograr que los movimientos migratorios sean de forma legal, ordenada y segura».
Antonio Aja, director del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de La Habana y uno de los principales especialistas en temas migratorios de la isla, no prevé una estampida de viajes, pues los cubanos deben obtener visas y cumplir otros requisitos exigidos por los países de destino, además de contar con el dinero para pagar los trámites y el boleto aéreo.
«Estamos viviendo una era de migración, una era de migración selectiva, controlada y por tanto no podemos pensar que los cubanos vamos a ser la excepción», manifestó a AFP.
Jorge Lara, un joven de 20 años que aspira a viajar, comentó que tiene intención de ir a Estados Unidos. «Quiero ir a visitar a mi papá que vive en EEUU desde hace 20 años y a conocer a mis hermanos, y quiero hacerlo este año antes de iniciar mis estudios de Medicina», indicó.
Según los acuerdos migratorios vigentes desde 1994-1995, Washington debe conceder a los cubanos 20.000 visas anuales.
Durante los mandatos de George W. Bush (2001-09), «la cifra de visas concedidas estuvo en esos años por debajo de lo acordado», dijo el académico Enrique Ubieta, en un artículo publicado en el «Granma», pero admitió que «solo a partir de la toma de posesión (...) de la Administración de Barack Obama, se han expedido 20.000 visas al año, según lo acordado».
Los expertos pronostican que el flujo continuará hacia los destinos tradicionales de los cubanos: EEUU, donde reside el 80% de ellos y tiene leyes que privilegian a los cubanos, sobre todo a aquellos que hacen pública su oposición al Gobierno, Canadá, México, Estado español y otras naciones de Europa.
Pero, la crisis económica en los países de la Unión Europea y, en especial, en el Estado español se ha convertido en un elemento disuasorio para emigrar. Los especialistas calculan que de los mas de 66.000 cubanos que adquirieron la ciudadanía española mediante la Ley de Memoria Histórica, menos del 50% emigró.
Washington saludó esta reforma migratoria, si bien no modificará su política de visas para los cubanos. En Estados Unidos vive el 85% de los cubanos emigrados y sus descendientes.