Huelga indefinida en Incoesa desde el jueves al romper el propietario el acuerdo previo
Los trabajadores de Incoesa de Bedia iniciarán este jueves una huelga indefinida para exigir que el propietario de la empresa, Higinio Arteta, cumpla lo acordado a finales de diciembre. Días después del acuerdo, se echó para atrás y mantuvo los despidos de nueve trabajadores.
Juanjo BASTERRA | BILBO
La platilla de Incoesa, ubicada en Bedia, iniciará este jueves una huelga indefinida para exigir a la dirección que «cumpla con lo acordado: readmita a los nueve trabajadores despedidos, tramite cuatro prejubilaciones y reabra la negociación del plan de viabilidad», de este fabricante de transformadores.
Tras alcanzar un acuerdo con los trabajadores a finales de diciembre, la dirección se echó atrás y lo rompió. El miembro del comité Juan Jesús Sánchezdenunció que «el empresario ha dinamitado el acuerdo». Esa actitud ha generado un alto nivel de «desconfianza», según explicaron ayer los representantes de LAB en la rueda de prensa. Así, el responsable de la Federación del Metal de LAB, Jonan Goñi, recordó que «gracias a la lucha de la clase trabajadora se han conquistado los derechos que hoy en día nos quieren arrebatar. Y, por supuesto, va a ser gracias a la lucha y la movilización como se va conseguir que Incoesa cumpla lo acordado con sus trabajadores. Desde ese convencimiento de que luchando es posible cambiar la actual situación», Goñi recordó que «la destrucción de empleo que se está dando en Euskal Herria debería preocuparnos a todos» y se refirió, en concreto, a la zona de Arratia «que está sufriendo en primera persona esta sangrante situación. En Bedia el paro ha aumentado un 9% respecto a los datos de hace un año. Esta destrucción de empleo no es la consecuencia de ninguna ley natural, sino que es consecuencia directa de decisiones empresariales», precisó.
Culpó a Incoesa de provocar esta situación de destrucción de empleo al «llevarse parte del trabajo que se realizaba en Bedia a una empresa del mismo propietario ubicada en Cáceres, donde recibió varios millones en ayudas de la Junta de Extremadura».
Jonan Goñi añadió, como segunda reflexión, «la irresponsabilidad que supone romper unilateralmente los acuerdos que existen con la clase trabajadora. Higinio Arteta, propietario de Incoesa, así lo ha hecho. Teniendo en cuenta el peso que este empresario ha tenido en la patronal vizcaina, tomamos nota. Nos preguntamos si esta es la actitud de los empresarios vizcainos para gestionar los tiempos actuales. Romper las reglas de juego acarrea la conflictividad y la imposibilidad de acuerdos», remarcó.
LAB emplazó a Arteta «a restaurar la normalidad en su empresa» y le interpeló públicamente para que «retome las vías de negociación y el diálogo». Terminó llamando a los trabajadores de Arratia «a seguir defendiendo sus derechos».
LAB exige que se cumpla el acuerdo suscrito a finales de mes: se readmita a los nueve despedidos, tramite cuatro prejubilaciones y reabra la negociación del plan de viabilidad del fabricante de transformadores.
El secretario general de la Federación del Metal de LAB, Jonan Goñi, recordó que el propietario Higinio Arteta decidió trasladar a Cáceres parte de la producción, porque allí obtuvo una ayuda millonaria de la Junta de Extremadura.