Hollande defiende la intervención en Mali y aumenta el despliegue
El Ejército francés aumentará hasta 2.500 soldados el contingente implicado en la intervención contra los grupos islamistas en Mali, que ayer defendió el presidente francés, François Hollande, con el argumento de «parar la agresión terrorista» y el apoyo europeo. La decisión de enviar más soldados augura una prolongación del conflicto, en el que las tropas francesas ya se han implicado en la ofensiva terrestre.
GARA | DUBAI-BAMAKO
El presidente francés, François Hollande, defendió ayer la intervención militar en Mali asegurando que «se efectúa bajo el marco de la legalidad internacional y con la demanda expresa de las autoridades malieneses, y el apoyo de los países africanos y de Europa».
Desde Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos), donde se encuentra de visita oficial, subrayó que sus objetivos son «parar la agresión terrorista»; asegurar Bamako, «donde tenemos varios miles de ciudadanos», y permitir al Gobierno Mali «recuperar su integridad territorial».
«Francia está en primera línea. Si no lo hubiera estado, hoy Mali estaría totalmente ocupado por terroristas, y otros países africanos amenazados», indicó el presidente francés.
Hollande añadió que «Francia no tiene vocación de permanecer en Mali», pero quiere asegurar que antes de salir haya «autoridades legítimas, un proceso electoral y no haya terroristas».
El aumento del contingente francés en el país africano hace prever una presencia prolongada. París cuenta ya con 750 militares, procedentes esencialmente de países vecinos en los dispone de bases permanentes, y el Ministerio de Defensa habla ya de aumentarla a 2.500, un número mayor del que había en Afganistán hasta que se reforzó el contingente en 2008.
Cuenta también con un escuadrón blindado de unos 60 vehículos llegados desde Abidjan, en Costa de Marfil. La mitad de estos blindados partieron ayer de Bamako hacia el norte.
Un grupo de soldados se encuentra en la capital y otro en el centro de Mali, en torno a Sévaré, cerca de la zona de guerra. También se han instalado en el aeropuerto de Bamako dos cazas Mirage F1CVR y seis Mirage 2000D, que llevan a cabo los bombardeos, además de tres aviones de reavituallamiento C135. Igualmente, se emplean helicópteros con misiles y los ultramodernos Raffale.
Ayer la aviación francesa prosiguió, por quinto día consecutivo, sus bombardeos contra las posiciones de los rebeldes islamistas que avanzaban desde el territorio tuareg de Azawad hacia Bamako, y se centraron especialmente en la localidad de Diabali, tomada el lunes por los insurgentes pese a los anuncios de París de haber detenido el avance islamista hacia el sur.
Tropas francesas por tierra
Unas horas después se anunció el avance por tierra de tropas francesas y malienses hacia esta ciudad.
Además, el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian, declaró que la estratégica ciudad de Konna, en el centro Mali no había llegado a ser recuperada por el Ejército de Mali, pese a que el sábado un teniente maliense aseguró controlar la ciudad «totalmente».
Le Drian confirmó que que en los próximos días tienen previsto llegar hasta los 2.500 soldados desplegados en Mali, en lo que el ministro calificó de «una misión difícil y duradera».
En cualquier caso, el Estado francés espera que sean fuerzas africanas las que compongan el grueso de las tropas que avancen hacia el norte. Hollande indicó que «lo más rápido posible», las tropas francesas «dejarán el lugar a las africanas», en referencia a la misión avalada por el Consejo de Seguridad de la ONU y que estaría compuesta por 3.300 efectivos africanos, principalmente de los países de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao).
«Serán ellos los que lleven hasta el final la reconquista del norte» de Mali, subrayó, apuntando que la llegada de las tropas africanas podría tardar «toda una semana».
Nigeria, que asegurará el comando de la fuerza internacional, anunció que aportará 900 soldados. Níger contribuirá con 600, Senegal, Burkina Fasso y Togo con 500 y Benin con 300, mientras que el resto de países se irán uniendo posteriormente, aunque todavía no se ha desarrollado ningún calendario operacional. Los jefes de Estado Mayor de la Cedeao se reunieron ayer en Bamako para coordinar la estrategia de la intervención, una intervención que les puede acarrear represalias de los islamistas y riesgos de crisis humanitaria de la población que huye de la guerra.
La jefa de la diplomacia europeas, Catherine Ashton, afirmó, por su parte, que la crisis en Mali amenaza directamente a toda la Unión Europea (UE) y prometió que el bloque apoyará logística y financieramente a la misión africana que intervendrá bajo mandato de la ONU. «Bajo ninguna circunstancia podemos permanecer indiferentes», dijo Ashton en una intervención en el pleno del Parlamento Europeo, en la que afirmó que la misión comunitaria para entrenar a soldados malienses se desplegará «lo antes posible».
Avanzó que la UE contribuirá a financiar el despliegue de la fuerza militar africana y que también estudia dar apoyo «logístico» a esa operación. Ashton, en todo caso, no adelantó ninguna cifra de esa posible ayuda, que discutirán los ministros de Exteriores de los Veintisiete en una reunión extraordinaria convocada para mañana.
En cuanto a EEUU, el secretario de Defensa, Leon Panetta, señaló que «no consideramos enviar tropas en este momento al terreno (...) Apoyamos a los franceses en esta operación para detener terroristas y miembros de Al Qaeda que quieren establecer su base en Mali».
Críticas
Pero no todo son apoyos. El secretario general de la Organización de Cooperación Islámica, Ekmeleddin Ihsanoglu, pidió «un cese el fuego inmediato» de la intervención militar francesa y una vuelta a las negociaciones entre el Gobierno de Mali y los grupos islamistas armados.
Qatar expresó sus dudas sobre la eficacia de la intervención, estimando que el recurso a la guerra no arreglaría el problema y apelando al diálogo. Igualmente, Túnez expresó su oposición por principio a toda opera- ción militar no africana en el continente.
El ministro tunecino de Asuntos Exteriores, Rafik Abdessalem, consideró que «los problemas que suceden en África deben resolverse en un contexto africano».
Desde Afganistán, los talibanes condenaron la «desastrosa» intervención del Ejército francés. «Todas las grandes potencias deberían sacar lecciones de la fallida política americana en Afganistán y en Irak», afirmó el portavoz talibán, Zabiullah Mudjahid. «Cuando Francia comenzó a retirarse de Afganistán, parecía que el Gobierno francés extendería su posición antiguerra a otras regiones del mundo. Pero rompió su compromiso de paz invadiendo ilegalmente el territorio maliense con su Ejército», añadió
En Tombuctú, una de las principales ciudades del norte del país, una manifestación protestó por la intervención francesa, con pancartas en las que se podía leer «no a la guerra», «no a la intervención extranjera, sí a las negociaciones».
Por otra parte, el ministro maliense de Exteriores, Tieman Coulibaly, rechazó la ayuda ofrecida por los independentistas tuareg del MNLA para combatir a los islamistas sobre el terreno afirmando que «el MNLA ya no existe desde un punto de vista militar», asegurando que habían abandonado sus armas.
Más de medio millón de malienses han abandonado sus hogares huyendo del conflicto que asola su país y se refugian en países vecinos o vagan como desplazados en el interior, según el Programa Alimentario Mundial (PAM). Casi la mitad son desplazados internos.
Euskal Herrian bada Maliri berebiziko arretaz so egiten dion herri bat: Angelu. Lapurdiko herria senidetuta dago Konna hiriarekin, hau da, urtarrilaren 9an gerrillari islamistek Maliko armadari kendu ostean, joan den ostiralean armada frantsesak berreskuratzeko eraso egin zion horrekin. Konnaren eta Angeluren arteko senidetze harremana nabarmen indartu zen 2008tik goiti. 30.000 biztanleko Maliko hiri horretako tribu-buruzagi Ibrahima Kampo behin baino gehiagotan izan da Euskal Herrian. Hain zuzen, frantsesen erasoa gertatu zenean ere Angelun zegoen, Maliko Taï Shi federazioaren izenean Frantziako federazioak ikastaro batera gonbidaturik. Angeluko Udalaren eta beste eragileen laguntzari esker, 2010eko apirilean Angelu etxea deritzona ireki zuten Konnan, «garapen turistikoa, ekonomikoa, kulturala eta soziala» sustatzeko, Guy Mondorge Akitaniako kontseilari eta zinegotzi angeluarrak bere blogean adierazi duenez. Mondorge bera bertan izan zen egun hartan, bertako eta Moptiko (eskualdeko hiriburua) agintariekin batera. Alta, Angeluko Montaury ingeniari eskolako 35 ikaslek bost astetan, «zailtasun handiei aurre eginez», eraiki zuten etxeak ez du bere helburu guztiak betetzeko aukerarik izan. Bertan eta inguruetan izandako bahiketek eta matxino islamisten gertutasunak arrisku handiko zona bilakatu zuten hiria. Zinegotzi sozialistak adierazi duenez, «egoera dela-eta Konnan jarduera oro edota frantses bisita ofizial oro ezinezko bihurtu da». GARA
El ministro francés de relaciones con el Parlamento, Alain Vidalies, se quejó de la escasa movilización de los europeos en la crisis de Mali, y dijo que espera que las cosas mejoren. Reconoció que «no se puede decir que Francia esté sola» pero «hay ausencias que son un poco lamentables», y se puede constatar que en Europa hay una escasa movilización.
Bélgica decidió desplazar dos aviones de transporte Hércules C-130 y dos helicópteros de evacuación sanitaria con ochenta soldados, indicando que dará apoyo logístico y de formación pero no desplazará tropas de combate.
París obtuvo el lunes «la comprensión y el apoyo» de los 14 miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, aunque algunos presentaron dudas sobre cómo evolucionarán los acontecimientos. Ban Ki-moon expresó también su apoyo a la operación francesa, subrayando la necesidad de la reconciliación política en Mali.
Alemania habló ayer de ofrecer apoyo «logístico», «médico» y «humanitario». Por otro lado, Marruecos, Argelia y el Estado español han autorizado a los aviones militares franceses que sobrevuelen sus territorios.
Los islamistas armados que controlan el territorio tuareg de Azawad, al norte de Mali, han evacuado las principales ciudades que ocupaban hace nueve meses, en lo que aparenta ser más un «repliegue estratégico» que un desbandada. Los bombardeos de la aviación francesa frenaron el avance que habían iniciado hacia el sur los grupos de Ansar Dine, apoyados por Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI) y el Movimiento para la Unidad y la Jihad en África del Oeste (Mujao). Pero a la vez que abandonaban sus bastiones, ocuparon una pequeña localidad, Diabali. Su repliegue sobre el desierto y las montañas que conocen bien forzará a las tropas malienses y francesas -y cuando lleguen, los refuerzos africanos- a intervenir sobre el terreno. Si llevan el conflicto a una guerra de guerrillas o con atentados, puede prolongarse indefinidamente.
Los grupos islamistas consiguieron controlar la región tras la ofensiva del independentista y laico MNLA, que reclama la independencia de Azawad, al que lograron expulsar. Pero, más allá de imponer la sharia (ley islámica), aglutinan diversos intereses y frágiles alianzas. Ansar Dine está compuesto por tuaregs y mezcla rivalidades personales y tribales. Mantiene lazos con AQMI, cuyo objetivo se extiende por todo el Sahel, mientras Mujao sigue siendo, en parte, una incógnita. Tampoco se conoce con exactitud el armamento y número de combatientes de cada uno.
Pero el gran problema de la intervención es qué hacer después, según el especialista en movimientos tuaregs Pierre Boilley, que advierte sobre la falta de una hoja de ruta sobre este territorio abandonado durante años. GARA