Después de tres días de toma controlada de beneficios, los inversores volvían a apostar por las compras y colocaron al Ibex por encima de los 8.600 puntos. El panorama les favorecía en casi todo. Solo la prima de riesgo, que merodeaba los 360 puntos, pudo aguar la fiesta de la recuperación del Ibex. En la parte positiva de la jornada brillaron los datos y los resultados en Estados Unidos. La positiva evolución de las peticiones semanales de desempleo y las ventas de viviendas nuevas en diciembre permitían sostener la senda alcista. También eran bien acogidas las cuentas de Citigroup y Bank of America, a pesar de que el primero redujo sus beneficios un 32% en 2012. No obstante, la excelente marcha del último trimestre servía a Citigroup para dibujar un mejor escenario de cara a este ejercicio. En Europa, los vientos eran asimismo favorables, dado que el BCE informaba de una mejoría de la confianza en los mercados financieros y Jean-Claude Juncker, jefe del Eurogrupo, descartaba ya la petición del rescate por parte de Rajoy. En este contexto, el Ibex acabó en los 8.628,90 puntos, tras sumar un 0,56%. Del resto de Europa, el más fuerte fue París (+0,96%), seguido de Fráncfort (+0,58%) y Londres (+0,46%). Dentro del Ibex, despuntaron al alza IAG (+4,64%), Acciona (+3,14%) y BME (+3,09%), mientras que Red Eléctrica y Técnicas Reunidas, que cayeron más de un 1%, encabezaron los recortes. La firma de ingeniería descontó un dividendo de 0,66 euros. En París, la estrella indiscutible fue Carrefour al saltar un 6,11%, después de mejorar sus cifras de negocio el año pasado.