Con entradas a mitad de precio entre socios y abonados para potenciar «el efecto Miribilla», el Uxúe Bilbao Basket busca esta tarde una victoria ante al Valencia Basket en el Bilbao Arena (ETB1, 20.30) en la tercera jornada del Last 16 de la Eurocup.

El entrenador Fotis Katsikaris confía en la afición: «Nos van a apoyar como siempre, todos saben que es un partido importantísimo y seguro que mañana -por hoy- tendremos otra vez un ambientazo y nos ayudarán mucho, como siempre».

Están obligados a ganar tras cosechar dos derrotas en los dos primeros partidos de esa segunda fase de la competición. La primera fue frente al CEZ Nymburk en casa y la segunda, por 23 puntos de diferencia, en su visita al VEF Riga. Esa diferencia le supuso al cuadro vizcaino el punto más bajo de una temporada que comenzó a lo grande y con un invicto paso por la Fase Regular de la competición.

El técnico heleno espera «un partido duro porque el Valencia viene de una derrota y seguro que quieren recuperar sensaciones». Además, el preparador del Bilbao Basket reconoce que los valencianos «saben perfectamente que si nos ganan nos pueden dejar fuera y puede ser una motivación para ellos».

Se impone la reflexión, ante la amenaza real de fracasar en uno de sus grandes objetivos del curso, los últimos cruces de un torneo que da billete Euroliga al que lo gane. Según lo visto en la última jornada liguera, parece que el Uxúe ha reaccionado. Lo ha hecho de la mano de Mumbrú, Raúl López y Axel Hervelle, que habían bajado prestaciones respecto a su buena labor anterior en un último tramo del calendario. Vasileiadis y Hamilton son las otras piezas claves de una rotación en la que la continuidad la aporta Grimau.

Fue Hervelle quién recordó anteayer que a partir de ahora todos los encuentros son importantes. «Sabemos que el del Valencia es un partido clave. Ya hemos fallado mucho en la Eurocup y tenemos que ganar como sea porque ahora todo son finales y hay que hacerlo para pasar». El pívot belga ve al rival como un grupo: «Han tenido muchas bajas, pero siempre han estado arriba y han ganado muchos partidos. Saben suplirse los unos a los otros y por eso creo que están tan bien».

Recuerdo reciente

Cuarto en la Liga Endesa, la sensación de crisis vivida por los hombres de negro tenía que ver sobre todo con su nefasto arranque en el Last 16, diametralmente opuesto al del Valencia, que llega con el margen de dos triunfos. En la retina de los aficionados queda el espléndido partido liguero que ambos protagonizaron a principios de mes en la Fonteta de San Luis, que tras la prórroga terminó con un 113-111 para los taronjas.

Su entrenador Velimir Perasovic no se fía. «Evidentemente, en su casa son mucho más complicados, pero nosotros tenemos la obligación de ganar uno de los dos partidos al Bilbao» en los que en los se enfrentarán de manera consecutiva.

Precisamente ayer se conoció la sede de la final, que se celebrará el 13 de abril. Será en el pabellón RTL Spiroudome de Charleroi. La Eurocup ha recuperado este año la final a un partido, tal y como sucedió entre los años 2004 y 2007, cuando se llamaba Copa ULEB y la final se jugó también en esta localidad belga.