Rotterdam o cómo vertebrar ideas desde los márgenes del cine
Hoy comienza la 42 edición del Festival Internacional de Cine de Rotterdam. Hasta el 3 de febrero, la ciudad holandesa proyectará algunas de las mejores producciones de cine independiente. Es, junto a Cannes, Venecia, Berlín, Locarno y Donostia, uno de los acontecimientos cinematográficos más relevantes.Iratxe FRESNEDA | BILBO
Parafraseando a Tolstoi, todas las ciudades del interior se parecen, pero las portuarias lo son cada una a su manera. Y todos los festivales se asemejan pero cada uno parece desear una identidad propia que lo distinga de los demás competidores y que sea atractivo para la industria del cine. Rotterdam se distingue del resto de los festivales europeos por su arriesgada capacidad a la hora de programar películas firmadas por realizadores desconocidos, «independientes». Durante más de diez días la ciudad portuaria ofrece una selección arriesgada y al margen en la que las exposiciones de artes visuales y conciertos completan una programación para mentes inquietas.
En un circuito de festivales en constante competición el de Rotterdam ha apostado desde sus inicios por las raíces del cine, buscando nuevos valores en los márgenes de la creatividad del hecho fílmico. Puede decirse que de algún modo actuaron con imaginación y perspicacia cuando en 1988 crearon el Hubert Bals Fund, uno de los pioneros en financiar y acercar al mercado europeo cinematografías independientes llegadas de Asia, Latinoamérica o África.
CineMart, iniciativas de crowdfunding, destreza para saber que youtube es un canal más que interesante para difundir el cine.... Rotterdam apuesta por innovar, mirar a lo que puede ser tendencia en un futuro cercano, hoy. Es el «Efecto Rotterdam». Un efecto que tiene su origen en presentar en competición solamente a las primeras o segundas películas de un director. Sea como fuere este es un certamen que apuesta por los nuevos talentos que van surgiendo en torno al cine y que además explora la experiencia interactiva en la que participan el público y distintos agentes del cine alejados de lo que comúnmente conocemos como el circuito comercial.
Presencia latinoamericana
16 son los títulos que competirán por los premios Tiger Hivos, galardones que suponen un importante estímulo para directores jóvenes y que pretenden abrirse camino en una industria en apariencia cada vez más accesible pero en la que no demasiados logran sobrevivir. En esta 42 edición del IFFR, el largometraje encargado de inaugurar el certamen es «De wederopstanding van een klootzak» (The Resurrection of a Bastard), de Guido van Driel, y esta es la primera ocasión en la que una película holandesa abre el festival desde 1998.
Además destaca la importante presencia latinoamericana en todas las secciones del festival . Aquí tomarán parte las cintas mexicanas «Penumbra», de Eduardo Villanueva, y «Halley», de Sebastián Hofmann, a las que se suman la película argentina «Noche», de Leonardo Brzezicki, y la brasileña «Eles voltam» (They'll Come Back), Marcelo Lordello.
Los tres ganadores de los premios Tiger Hivos serán elegidos por un jurado compuesto por cinco profesionales relevantes del mundo del cine y la cultura. Entre ellos, el astuariano José Luis Cienfuegos, director artístico del Festival de Cine Europeo de Sevilla, la actriz iraní Fatemeh Motamed-Aria, el director ruso Sergei Loznitsa y el realizador holandés Kees Hin. El jurado se completa con el pintor, escultor, fotógrafo, artista plástico y realizador chino Ai Weiwei, quien tendrá que ver y juzgar las cintas desde su domicilio en Pekín y comunicarse con los miembros del jurado a través de Skype, debido a que su pasaporte ha sido requisado por las autoridades chinas.
Además de la multitud de secciones en las que bucear y perderse, Spectrum, es un apartado que presenta obras de realizadores experimentados y artistas que ofrecen, a juicio de IFFR, una contribución esencial a la cultura cinematográfica internacional. Nakata Hideo Johnnie To, Miike Takashi Oliveira, Sally Potter, Garrone, Reygadas o Bertolucci componen esta selecta selección.
Y como colofón al festival la esperada cinta, Stoker de Park Chan-Wook (Oldboy, Thirst, Sympathy for Mr. Vengeance). El thriller psicológico del surcoreano, que cuenta con la presencia de Nicole Kidman, Mia Wasikowska y a Matthew Goode entre otros, será el encargado de cerrar el IFFR 2013.
Documentales, cortometrajes, encuentros con cineastas y artistas, la cita ya ha comenzado en torno a De Doelen, y salas de cine como el Pathé o el Cinerama están ya habitados por la fauna que puebla habitualmente estos acontecimientos.
En esta 42 edición del IFFR, el largometraje encargado de inaugurar el certamen es «De wederopstanding van een klootzak» (The Resurrection of a Bastard), de Guido van Driel, y esta es la primera ocasión en la que una película holandesa abre el festival desde la edición de 1998.
El pintor, escultor, fotógrafo, artista plástico y realizador chino Ai Weiwei, miembro del jurado, tendrá que ver y juzgar las cintas desde su domicilio en Pekín y comunicarse con los miembros del jurado a través de Skype, debido a que su pasaporte ha sido requisado por las autoridades chinas.