El PP limita sus explicaciones y espera a una auditoría que no tendrá efectos
El Gobierno español apenas dará explicaciones en el Congreso sobre el «caso Bárcenas». La mayoría absoluta del PP sirvió para limitar sus comparecencias. Se aferran a la auditoría ordenada por Génova que no tendrá efecto, ya que el dinero negro no se apunta en las cuentas.
Alberto PRADILLA | MADRID
El PP se sirve de su mayoría absoluta para controlar los tiempos de sus explicaciones ante el Congreso español sobre la sucesión de escándalos financieros relacionados con su extesorero Luis Bárcenas. El Gobierno español hablará en la Cámara Baja, pero de forma limitada. Hoy únicamente tomará la palabra el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, mientras que el resto del Ejecutivo dará la cara en una sesión de control que tendrá lugar el próximo miércoles. Eso sí, las explicaciones sabrán a poco. El presidente, Mariano Rajoy, apenas dedicará siete minutos y medio a contestar las tres preguntas que podrá plantear la oposición.
Montoro será el único miembro del Gobierno español que comparezca esta semana. Lo hará a petición propia, en la comisión de Hacienda y se centrará en la amnistía fiscal. En un principio, el abogado de Bárcenas aseguró que su cliente había regularizado diez de los 22 millones de euros de los que dispuso en cuentas suizas durante el período especial decretado por el Ejecutivo. La Agencia Tributaria lo desmintió rápidamente, por lo que su titular dará explicaciones hoy mismo. Poco podrá aportar teniendo en cuenta que la normativa se basa en la opacidad y en no aportar los datos de los contribuyentes.
Sesión de control el miércoles
Rajoy y el resto de miembros del Gobierno español hablarán dentro de una semana, durante la sesión de control extraordinaria. Una fórmula muy limitada en las que cada turno de pregunta y respuesta apenas duran cinco minutos. Pese a ello, el PP saca pecho y asegura estar respondiendo a las demandas sociales. Su portavoz, Alfonso Alonso, insistió ayer en su oferta de un gran pacto contra la corrupción que apunta al blindaje entre formaciones políticas.
«Ahora toca que el PP explique sus cuentas», fue la respuesta de Alfredo Pérez Rubalcaba, secretario general del PSOE. Desde Ferraz se va a recurrir a la Audiencia Nacional española, a quien instarán a investigar la contabilidad «b» de Génova. Unas pesquisas que el PP aseguró que haría por su cuenta. Claro, que resulta difícil que en un estudio sobre los libros de cuentas de la formación incluyan los fondos en negro, todos ellos ilegales.
En una entrevista concedida a Info7 Irratia, el diputado de Amaiur Sabino Cuadra denunció que los casos de corrupción de estos últimos años tienen que ver «con la estructura misma sobre la que se ha asentado este régimen pseudodemocrático». El diputado abertzale denunció la política de «puertas giratorias» en la que altos cargos públicos «aterrizan» en los consejos de administración de grandes compañías, y viceversa, así como el legado de una transición «tramposa» que dejó muchas de las estructuras del antiguo régimen «carcomidas por las termitas».
Como ejemplo, Cuadra recordó las declaraciones de Alfredo Pérez Rubalcaba, pidiendo que se investigue el «caso Bárcenas». Unas afirmaciones que, tal y como indicó el diputado soberanista, contrastan con la actitud del PSN en Nafarroa, quien se ha negado a crear en el
Parlamento una comisión de investigación para aclarar los hechos acerca de la CAN.
Por otro lado, el «caso Bárcenas» también podría tener sus ramificaciones en Euskal Herria. Según revelaba ayer «El Correo», el extesorero fue el encargado de contratar escoltas entre 1997 y 2000, aunque el PP de la CAV negó toda relación. GARA
El expresidente del Gobierno español José María Aznar anunció ayer que demandará al diario «El País» por informaciones acerca de su responsabilidad en la contabilidad «b» del PP cuando dirigía el partido de Génova.