Según informó ayer ELA por medio de un comunicado, los hechos se remontan a la negociación del convenio colectivo de 2011 cuando la dirección de la empresa automovilística «excluyó de manera deliberada» a esta central de las reuniones negociadoras, «ya que solo mantenía contactos con los sindicatos cercanos a sus planteamientos, UGT, CCOO, USO y Ekintza».

ELA denunció esta situación pero la demanda fue desestimada en primera instancia por el Juzgado Social de Gasteiz y, tras ser recurrido el fallo, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha admitido el recurso del sindicato en su totalidad.

El tribunal considera probada la vulneración de la libertad sindical de ELA ya que la empresa Mercedes Benz «obstruyó y cercenó la capacidad de representar no solo a sus afiliados sino a la plantilla en general», explicó el sindicato.

Además, el Tribunal proclama el derecho de esta central a participar en las reuniones que se celebran en adelante en las que se traten asuntos que afecten al conjunto de los trabajadores.

«Vulnerar derechos»

Desde ELA valoran que «lamentablemente, y ya son demasiadas, los tribunales están condenando a Mercedes Benz por vulnerar derechos de los trabajadores». Añade en su nota que «siendo esto un aspecto muy positivo para el sindicato ELA, creemos que no debería ser el camino para que la dirección respete a los trabajadores».

En el comunicado, la central exige públicamente a la empresa que «cambie de actitud ya que siendo una empresa tan representativa debería hacer gala de un talante negociador con más altura de miras».

En su valoración final, ELA considera que la sentencia es «muy positiva, no solo para nuestros afiliados sino para todo el conjunto de trabajadores de Mercedes» Además, insta a las centrales «que dan cobertura a este tipo de actitudes ilegales y retrógradas a no ser copartícipes en este tipo de conductas del que la única beneficiada a la larga será la empresa y lastrará al conjunto de trabajadores de nuestra factoría».