Con dos equipos que esta noche sobre el verde de San Mamés buscarán la victoria desde el minuto uno de juego no parece que peligre la racha por la cual no se presencia un empate sin goles entre Athletic y Atlético en La Catedral en Liga desde hace casi 50 años. En las aspiraciones particulares de cada conjunto solo el triunfo les contenta, sobre todo a los locales, que quieren refrendar los brotes verdes del Villamarín con un triunfo de campanillas y reafirmación ante el segundo clasificado del campeonato. Un rival ante el que, es cierto, ni afición ni jugadores las tienen todas consigo por la peligrosidad que entrañan los colchoneros.

«Se equivoca poco, deja pocos espacios atrás y juega bien al contragolpe. Trataremos de ser nosotros, pero habrá que tener cuidado porque a veces ellos se repliegan pensando más en que les dejes espacio para cogerte en una contra que en otra cosa», reconoció ayer el capitán Andoni Iraola, que tiene muy claro que los del Cholo Simeone «no necesitan hacer un partidazo para ganarte», todo lo contrario de los bilbainos, que deberán dar el máximo para salvar un importante test no solo por los puntos que hay en juego sino por el subidón emocional.

El técnico Marcelo Bielsa dijo albergar dudas en el once titular que pondrá en liza y ayer ese titubeo se pudo apreciar en Lezama -además de una nueva pancarta, esta vez en defensa de Amorebieta y contra Josu Urrutia, con la sospechosa grafía `kampora'- cuando mientras el viernes situó a Iturraspe por delante de la defensa, este sábado hizo lo propio con San José.

El vizcaino o el navarro serán los que apuntalen ese once que puede empezar a ser por fin reconocible por la afición, con Aurtenetxe ya en el lateral diestro, De Marcos ocupando su espacio más natural y tirando desmarques, extremos reconocidos con Susaeta y Muniain, y esa zaga que debe pasar un nuevo examen con Ekiza y Laporte, prueba de fuego a la que no será ajeno un cuestionado Iraizoz al que bien vendría el aplauso de una grada que se dice sabia. En punta, un Aritz Aduriz enrachado que si marca esta noche habrá igualado los 40 goles del gasteiztarra Peio Uralde vestido de rojiblanco.

Tras el buen sabor de boca que dejó ante el Betis no solo el juego de los leones sino también su declaración de intenciones de pelea cada partido hasta el final, hay expectación en la masa social rojiblanca por ver si se consolidan esas maneras, si jugadores necesarios como Muniain vuelven a sentirse cómodos y alegres, y si el Athletic pone candado a la portería propia y descerraja la del rival. No hay que olvidar que estamos ante el segundo equipo menos goleado de la categoría tras el Málaga.

Esta semana no ha habido llamamientos de los jugadores a la grada para que sea ese jugador número 12, quizá porque estamos ante un encuentro en los que por la entidad del rival y por quién es el contrario, La Catedral sabrá ambientar el duelo, más allá de su enésimo veredicto sobre Llorente. Hoy, lo que importan son los tres puntos. Mucho más que tres puntos.