Agónica victoria de Uxúe Bilbao Basket en Valencia
Kostas saca el desfibrilador
El griego anotó el triple de la victoria de un partido en el que los vizcainos habían tirado por las pérdidas.
VALENCIA BASKET 60
UXÚE BILBAO BASKET 61
Arnaitz GORRITI
Uxúe Bilbao Basket sigue vivo y con las opciones intactas en el Last 16 de la Eurocup. Tras un partido pastosísimo que nada tuvo que ver con el 113-111 del pasado día 6, un triple de Vasileiadis casi sobre la bocina dio una agónica victoria de los hombres de negro. Tan agónica como necesaria, porque el 60-58 que parecía estar destinado a terminar el duelo suponía la eliminación, quizá no matemática pero sí en gran medida, de los bilbainos.
No fue fruto de una jugada ensayada, ya que la finta de pick'n roll que debían hacer Raül López y Mumbrú no salió. El base de Vic vio que Vasileiadis salía más allá de la línea de 6,75 metros y pedía el balón. Raül le cedió el balón y Kostas engatilló. El 6 de enero un triple así supuso el 101-101, para caer en el tiempo extra; ante el Barcelona, el triple de la victoria golpeó el hierro; anoche, la bola entró limpia, haciendo revivir a Uxúe Bilbao Basket como si hubiera sacado el desfibrilador.
Anteriormente, habían pasado muchas cosas. No todas ellas buenas, porque el partido tuvo de emoción lo que le faltó de calidad. Valencia Basket siempre fue por delante, aunque con ventajas muy pequeñas, gracias a la dirección de Ribas y a los interiores Doellmann y Lishchuk, con apariciones fugaces del escolta Rafa Martínez.
Los de Katsikaris, por contra, respondían gracias a los «mineros», ya que las estrellas, sobre todo los dos bases, no daban una. Hervelle, Grimau, o un muy luchador Moerman -que brilló al inicio para desaparecer después- dominaban el rebote y lograban puntos que rescataban a su conjunto. También cabe destacar que Pilepic aportó bastante en los escasos minutos de los que dispuso. Sobre todo anotó un triple clave cuando Valencia Basket lograba su máxima renta, al irse de ocho puntos al final del tercer cuarto: 46-38. Al final del último cuarto, el partido seguía en un puño: 50-45.
Derrota, victoria y viceversa
Sin embargo, a falta de poco más de un minuto, la victoria parecía decantada hacia Bilbo. De hecho, con 56-58 en el marcador tras un estupendo cuarto final de Hamilton, Rakovic tuvo la sentencia en su mano, pero erró la bandeja -no fue su día-, y Rafa Martínez empataba desde la línea de tiros libres.
Posteriormente, la enésima pérdida bilbaina -21 en total, sobre todo por parte de un desconocido Raül López- y una muy mala defensa del pick`n roll entre Pau Ribas -que, sin ser base, fue el mejor del partido ejerciendo de tal- y Doellman supuso un «dos más uno» con el que los de Perasovic se adelantaban 60-58 y además provocaban la quinta falta a Hamilton.
Por fortuna, el estadounidense erraría el tiro libre, y aunque agarraría el rebote de ataque, acabaría perdiendo el balón y, a falta de 24 segundos, le otorgaba una última opción a Bilbao Basket. Fotis Katsikaris preparaba la última jugada con un tiempo muerto.
El preparador heleno dio la responsabilidad a Raül López y Mumbrú, mientras que los pupilos de Perasovic decidían defender en lugar de hacer personal -también es cierto que estaban muy cargados de faltas y que Bilbao Basket, con un porcentual de 4 de 15 en triples, no tenía el día desde lejos-.
La jugada no salió bien, pero Vasileiadis, ese «inconsciente» que tira y sigue tirando mientras siga faltando tiempo, arregló el entuerto. Uxúe Bilbao Basket empata a victorias con Valencia Basket, pero tiene el average particular ganado, y tanto Riga -aunque el average del cuadro letón será difícil de remontar, ya que caía por 23 puntos- como Nymburk son perfectamente batibles. El desfibrilador de Kostas Vasileiadis le puede alargar la vida a Bilbao Basket en la Eurocup.