La navaja de Ockham es un principio de economía según el cual, en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla suele ser la correcta. El Athletic de esta temporada mareaba demasiado la perdiz y disparaba poco a portería, y está claro que si uno quiere llegar al gol, lo más sencillo suele ser chutar. Es como la suerte, que uno no la suele encontrar si no la busca. Solo el Real Madrid, con 25 remates, ha disparado más veces que el Athletic en un partido de Liga contra el Atlético de Simeone. Lo hizo hasta en 22 ocasiones, de las que solo una decena vieron portería, aunque tres acabaron en el fondo de la red. Es el tercer partido de los de Marcelo Bielsa sumando más remates a portería que su rival. Un síntoma más de que el equipo parece haber cambiado la negativa inercia que arrastraba.

En la derrota en casa ante el Getafe en octubre, los leones chutaron a gol más veces que los azulones. A partir de ahí, ante Granada, Sevilla y Madrid el saldo fue, en cambio, negativo. Volvió a chutar más que su adversario -nada menos que 26 veces- ante el Depor en casa, y solo pudo empatar a uno. Desde ese partido, ni ante Barça, Celta, Mallorca y Zaragoza logró mantener de su lado esa balanza rematadora. El punto de inflexión fue el choque ante el Levante, donde hubo empate a disparos a gol, y a partir de ahí, y coincidiendo con la mejoría del juego de los rojiblancos, tres partidos seguidos superando en remates a sus oponentes.

Octavo equipo más rematador

Ahora mismo el Athletic es el octavo equipo más rematador de la Liga, con dos de sus jugadores, Aduriz y De Marcos, 11º y 19º, respectivamente, entre los que más se animan a tirar; el guipuzcoano es, además, el que más remata de cabeza de la categoría. Muy al contrario, y aunque, por ejemplo, San José lleve cuatro goles al saque de otros tantos córners, el Athletic es el cuarto equipo que menos remata a balón parado. Otro dato que ilustra a qué juega este equipo: es tras Real Madrid y Barça el conjunto que más remates realiza a partir de jugada colectiva.

En el plano individual, si bien es Aduriz el que acapara no solo goles sino disparos a puerta esta temporada, los tantos del domingo obra de De Marcos y Susaeta son el premio a un dato revelador: el jugador de Guardia, en 20 partidos, suma 37 disparos y de ellos 18 entre los tres palos, cuando la temporada pasada, en 37 encuentros contabilizó 49 chuts, 15 a portería. Unos números que revelan que va a más esa querencia que el alavés confiesa con el gol, aunque se le resista. Respecto al jugador de Eibar, Markel acumula 33 disparos, con 14 a puerta, más o menos en la línea de la campaña anterior cuando hizo 54 y 26.

Otra pieza fundamental del equipo como es Herrera parece que también le está cogiendo el gusto a lo de intentar el gol. De los últimos cuatro partidos, el exzaragocista ha sido ante el Levante y el Betis el rojiblanco que más veces remató. ¿Y qué hay de otro de los atacantes que debería sumar en el balance ofensivo como es Muniain? Pues que es bastante pobre: 17 remates lleva, frente a los 46 de la temporada pasada y los 42 de la última con Joaquín Caparrós.

Suerte que Aduriz está en vena. No solo marca, sino que chuta y mucho. Lleva ya 23 disparos, ¿saben cuántos realizó Llorente la campaña pasada? 38. Aritz está en buena línea. Nada que envidiar al de Rincón de Soto.