Aitor Hernández se marca el objetivo de entrar entre los veinte primeros en el Mundial de ciclo cross que se disputa hoy en Louisville, donde pondrá fin a una gran temporada en la que ha logrado veinte victorias.

Solo participar ya será un triunfo para Aitor Hernández porque la Federación Española comunicó en verano que no iba a pagar el viaje a ningún corredor al Mundial y ha tenido que buscar los 4.000 euros necesarios para abonar el viaje suyo y del mecánico que le acompaña.

«La Federación Española no se ha portado bien, no nos ha ayudado casi nada y, si no es por el Ayuntamiento de Ermua, no habría podido participar. Habría sido una pena, pero al final he podido solucionarlo», explica a GARA Aitor Hernández.

El Ayuntamiento de Ermua ha sido además su apoyo junto a Orbea en su mejor temporada, con 20 victorias y 8 podios en las 28 pruebas disputadas. La de hoy será su primera carrera de la temporada en el extranjero y el Mundial del año pasado es su principal experiencia con los mejores de la especialidad.

Recuerda que en su debut de Koksijde, en el que acabó el 52º, «fue un circuito que no me beneficiaba, era todo arena. Al salir atrás me cogieron muchas montoneras, perdí mucho tiempo en las primeras vueltas y luego fui mal. Este año en las primeras vueltas intentaré ir para adelante, buscar un grupo y aguantar lo más arriba posible. Solo correr ya es bueno, pero si pudiera acabar entre los veinte primeros estaría muy bien».

Sin complejos

Le gustaría encontrarse un circuito duro y no quiere buscar excusas en la falta de ritmo que puede tener en su primera carrera con los favoritos Albert, que defiende el título del año pasado, Nys, Pauwels, Wellens y compañía: «Al final si hay piernas da igual correr con vascos o belgas. El circuito pondrá a cada uno en su sitio y no me influye correr con ellos. En la carretera corrí con Armstrong y Ullrich y no les miraba diferente».

Destaca su progresión desde que dejó la carretera al recibir la baja de Euskaltel a finales de 2010 y volver a una especialidad en la que logró muy buenos resultados hasta su segundo año amateur, cuando decidió centrarse en la carretera: «Es mi tercera temporada. En la primera me dediqué a mantener la forma y aun así conseguí cuatro victorias y buenos puestos. El año pasado seis y este se ha confirmado que estoy ahí. Para mí ha sido una temporada muy buena y lo importante es que he disfrutado y que me he quedado muy contento conmigo mismo, más allá de los resultados. Estoy intentando vivir de esto y cada vez me resulta más fácil».

Quiere medirse con los mejores el año que viene. Hoy acabará la temporada y desde la próxima semana comenzará a buscar sponsors que le permitan tener el dinero necesario para correr en el centro de Europa: «Espero que me ayude tener el maillot de campeón de España. El año que viene quiero medirme con los de fuera para ver el nivel que tengo y para eso hay que buscar sponsors», destaca.

Tiene la esperanza de que Orbea le apoye a pesar de que este año ha dejado el equipo continental y el de mountain bike. «Voy a hablar con ellos y ver qué apoyos tengo porque me siento con 31 años con ganas y motivación para seguir cinco o seis más tranquilamente. Voy cogiendo experiencia, confianza, sé cómo regular las carreras, hago más entrenamientos específicos y eso te hace progresar».