Como el conejito del anuncio, el Barakaldo es inagotable. Ya son seis victorias y dos empates encadenadas, ocho jornadas en las que, además, no ha encajado un solo gol. La última muesca la anotaba ante su público, al imponerse al Noja (3-0) con rotundidad. Jon Orbegozo fue el protagonista indiscutible del choque al firmar los tres goles -le anularon otro- ante un rival que acabó con nueve por las expulsiones de Iñaki y Zarandona, aunque ambas llegaron en los últimos minutos, con el choque decidido.

La tarde del domingo fue claramente positiva para los equipos vizcainos. Incluyendo al Sestao River que, por fin, celebró su primera victoria como visitante, con la que además ponía fin a una racha negativa que se prolongaba ya cuatro jornadas. Por la mínima se impusieron los verdinegros a la Gimnástica (0-1), gracias al gol de penalti de Aketxe, de penalti, al filo del descanso, que también suponía la expulsión del local Gabri. Ya en la segunda parte llegarían también las rojas de Terrón y Apraiz, que convirtieron los últimos minutos en un martirio... con final feliz.

Con el empate (1-1) tuvo que conformarse el Amorebieta, otro que prolonga una racha espectacular para mantenerse en el cuarto puesto. Pere Milla adelantó a los catalanes a la media hora y Goñi empató para los azules mediada la segunda parte.

Triunfo local en el derbi

No muy lejos anda el Tudelano, que doblegó al Sanse (4-2). Juanpa, Chueca, Martí y Nandi marcaron para los riberos y Ozkoidi y Casteñada para el filial txuriurdin.

También empató la Peña Sport (1-1), que cae a puesto de promoción. Se adelantó con un gol de Yoel nada más comenzar la segunda parte, pero el Zaragoza B restableció las tablas con un gol postrero de Marc Mateu. Peor le fue al Real Unión, que cayó ante la SD Logroñés (1-0). Toledo firmó el único gol del partido.