Lakua admite que «seguramente» habrá recortes en políticas sociales
El consejero de Empleo y Políticas Sociales, Juan María Aburto, reconoció ayer en el Parlamento que «seguramente» habrá recortes en las prestaciones sociales, aunque no concretó qué partidas se verán afectadas. En materia de empleo, abogó por un marco de relaciones laborales «propio y diferenciado» e instó a recuperar de manera «urgente» el diálogo social.
GARA | GASTEIZ
Juan María Aburto compareció ayer ante la comisión correspondiente del Parlamento autonómico para exponer las líneas generales de actuación de su departamento durante esta legislatura que tendrá como objetivo principal «mantener la cohesión social y garantizarla».
Aseguró que la prioridad de su consejería es el empleo y mantener la cohesión social, aunque reconoció que «seguramente» habrá recortes este año y añadió que prefiere reducir partidas en vivienda que en prestaciones sociales.
El consejero admitió que, por la actual situación y la bajada del presupuesto de su Gobierno en 1.200 millones de euros, va a ser muy difícil que la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) pueda recuperar la bajada del 7% que sufrió el año pasado.
Anunció que desarrollará reglamentariamente la Ley de Servicios Sociales de 2008 y que hará especial referencia a la consecución de un «modelo estable de financiación», para lo cual citó la necesidad de «elevar» la recaudación fiscal sin poner en peligro la actividad económica.
Sobre el copago en los servicios sociales, contemplado en la Ley, el consejero señaló que la regulación de esta fórmula no traspasará «dos líneas rojas»: que nadie se quede sin una prestación por no poder pagarla y que nadie tenga más por tener más recursos económicos.
El consejero, que no detalló por dónde puede ir el copago, sí se mostró partidario de centrarlo en los servicios residenciales de las personas mayores.
Aburto se refirió también al fraude en las prestaciones sociales y dejó claro que «no es algo generalizado», sino que hay una percepción social mucho mayor de lo que realmente ocurre, una impresión que se propuso modificar.
Aburto avanzó su intención de «descargar» al Servicio Vasco de Empleo-Lanbide de tareas administrativas vinculadas a la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), en concreto a las personas con difícil empleabilidad. Explicó que la RGI «se ha comido a Lanbide» que, en estos momentos, no está haciendo intermediación laboral, que es en lo que pretende centrar su futuro.
El consejero propuso a todos los grupos, instituciones y medios de comunicación un «pacto» sobre esta renta básica para «no trasladar ni un día más la imagen que está estigmatizando a los perceptores».
En materia de vivienda, anunció un plan centrado en el alquiler social, porque los poderes públicos tienen que «garantizar el acceso a una vivienda, no a la propiedad».
Marco de relaciones laborales
En materia de empleo, insistió en que reclamará la transferencia de las competencias de las políticas pasivas de empleo para luchar contra el paro y conseguir un marco de relaciones laborales «propio y diferenciado».
El consejero instó a recuperar de manera «urgente» el diálogo social, porque existe el riesgo de que «se vayan por la borda los derechos laborales» de miles de trabajadores si no renuevan sus convenios laborales y a partir del próximo verano se aplica la ultraactividad prevista en la reforma laboral.
Adelantó que el lehendakari, Iñigo Urkullu, presentará próximamente en el Parlamento un plan de empleo que busca promocionar el autoempleo y las actitudes emprendedoras entre los jóvenes.
El consejero de Hacienda y Finanzas del Gobierno de Gasteiz, Ricardo Gatzagaetxebarria, en una entrevista concedida a Euskadi Irratia, adelantó que, aunque aún no son datos oficiales, el Producto Interior Bruto de la Comunidad Autónoma Vasca de 2012 caerá un 1,1% y que las previsiones para el presente año «también son ésas», mientras que para 2014 espera un crecimiento del 1,2%.
A su juicio, a pesar de que para 2014 se prevé que el crecimiento de la economía sea positivo, eso no quiere decir que «salgamos del todo de la crisis», porque los crecimientos serán «tan pequeños» que no serán suficientes para recuperar todo el empleo perdido durante los últimos años.
Además, advirtió de que no se puede pensar que la economía vasca vaya a volver a tener crecimientos del 3 o del 3,5% «de la década anterior», aunque consideró que «el hecho de que haya crecimiento ya es bueno, vistos los descensos que hemos tenido los últimos años».
Por otro lado, el consejero de Hacienda y Finanzas volvió a admitir que la disminución en la recaudación obligará al Ejecutivo autonómico a «tocar algo» en los Presupuestos para 2013 en ámbitos como la sanidad o la educación, aunque aseguró que «no se tocarán» los servicios principales que requiere la sociedad vasca, ya que los gastos que se reduzcan en sanidad y educación «no serán los básicos».
Entretanto, el diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, se refirió ayer a la propuesta de reforma fiscal planteada por el PNV para señalar que este partido «quiere vender humo» y que se ha visto obligado a ello porque «no tienen dinero».
Aunque se congratuló de que Bizkaia y Araba coincidan en la vía de reformar la fiscalidad, dijo temer que «no lleguen» hasta donde Gipuzkoa desea. GARA
EH Bildu denunció ayer que el PNV está confirmando estos últimos días que «va a romper todas las líneas rojas» que el lehendakari, Iñigo Urkullu, había marcado durante la campaña electoral, al trasladar finalmente a Euskal Herria «las políticas neoliberales de Rajoy».
La parlamentaria Belén Arrondo echó en falta en la intervención de Aburto «medidas y compromisos concretos» para corregir el rumbo de Lanbide. «Peor aún -dijo-, porque ha confesado que no tiene intención de echar atrás el recorte del 7% en las ayudas sociales», por lo que reclamó «que se cumplan los plazos legales establecidos para el pago de esas ayudas». GARA