ELA denunció que el nuevo Gobierno de Urkullu «incumple lo que prometió en la campaña electoral de dedicar mayor inversión y recursos a los servicios públicos». A juicio del secretario general de la Federación Gizalan, Igor Eizagirre, del responsable de Negociación Colectiva, Joseba Villarreal, y del miembro de la Mesa General de la Función Pública, Ramón Uriarte, se plantea un recorte presupuestario de más de 1.200 millones que «consolida las políticas de recortes anteriores» y «amenaza con imponer nuevos recortes». En este sentido, ELA subrayó que «si el Gobierno vasco hace suyas las 37,5 horas semanales así como el aumento de horas lectivas y ratio en educación, supondrá la destrucción de más de 9.000 empleos». Así, explica que «afectaría a Osakidetza con 2.500 empleos menos; en Educación, 6.000 menos; en la Administración general, 300 menos; 170 menos en Justicia y bajarían en 400 en las sociedades y empresas públicas».

ELA aseguró que en la reunión de la Mesa General de la Función Pública demandará la recuperación del 20% del poder aquisitivo perdido estos años atrás y que se garantice la jornada laboral de las 35 horas, una conquista de los empleados públicos a comienzos de este siglo. Los sindicalistas alertaron de que, por lo que se está viendo hasta el momento, «en lugar de consolidar y ampliar los servicios públicos de manera urgente, y apostar por el empleo publico, los responsables políticos están reduciendo los servicios públicos; destruyendo empleo y aumentando el desempleo».

Para ELA, es «inadmisible que ante la grave crisis que sufrimos», el Gobierno de Urkullu «consolide los recortes impuestos y plantee aplicar nuevos, en vez de cambiar de raíz la política fiscal y apostar por la defensa del autogobierno, la inversión en los servicios públicos, en educación, en sanidad, en coberturas sociales como medio para salir de la crisis, generar empleo y garantizar nuestro presente y futuro». Joseba Villarreal denunció que en lugar de «consolidar y ampliar los servicios públicos de manera urgente, están reduciéndolos, destruyendo empleo y aumentando el paro. Con esas medidas del PNV vamos hacia la destrucción de empleo», concluyó.