Unas 300 personas se manifestaron ayer en el aeropuerto de Loiu en la primera jornada de huelga convocada por los sindicatos con representación en Iberia para protestar contra el plan de reestructuración de la compañía aérea, que contempla un ERE para 3.807 trabajadores, el 19% de la plantilla. Son 20.000 los empleados de Iberia que secundan desde ayer el paro de quince días en tres ciclos de cinco jornadas seguidas. La primera jornada obligó a cancelar 236 vuelos, 81 de ellos de Iberia y el resto de sus filiales Iberia Express, Air Nostrum y Vueling

En Loiu, según informó CCOO, desde las 4 de la mañana los piquetes informativos estuvieron presentes en el aeropuerto sin que se produjesen incidentes, pero con la interposición de una denuncia por «la vulneración del derecho a la huelga por parte de la dirección de Iberia».

El responsable de servicios aeroportuarios de CCOO de Euskadi, Jon Herrera, destacó el seguimiento en el aeródromo viz- caino, que cifró en un 100%. «Solo hubo un trabajador en este aeropuerto que entró sin carta de servicio mínimo», señaló.

Maniobras de compañías

Asimismo, Herrera denunció el intento de algunas compañías aéreas que «se atrevieron» a programar vuelos que no estaban «protegidos», es decir, que no estaban contemplados como «servicios mínimos». En concreto, citó un vuelo a Santiago y otro a Valencia que los trabajadores «con carta» no atendieron por no estar obligados a ello.

Por otra parte, en Noain, la totalidad de la plantilla de Iberia, excepto los servicios mínimos, la secundaron, lo que originó la suspensión de siete vuelos con salida o destino en Iruñea. Fuentes del comité de empresa puntualizaron que los servicios mínimos fueron realizados por siete de las 32 personas que están en plantilla en Noain, donde, por la mañana, los trabajadores protagonizaron una concentración de protesta. En lo que respecta a Gipuzkoa, fueron dos los vuelos suspendidos con salida desde Hondarribia y que debían haber aterrizado en Iruñea y Madrid.