Los sindicatos CCOO, ELA, UGT y LAB denunciaron ayer la situación del convenio sectorial que regula las condiciones de trabajo en los centros que atienden a personas con discapacidad mental o física severa y a grandes discapacitados, en los que trabajan más de 800 personas.

Lamentan el «resultado infructuoso» del proceso de negociación y la desvinculación del mismo de la Agencia Navarra para la Autonomía Personal (ANAP). Defienden una plataforma única con «una serie de garantías» que eviten los efectos negativos de la reforma laboral, acusan a los empresarios de hacer una propuesta fuera de plazo y «con un contenido ofensivo e inadmisible».

La patronal propone aumentar la jornada efectiva, reducir los complementos de incapacidades temporales y eliminar el de capacitación, empeorar las mejoras sociales, eliminar acuerdos de empresa, reducir vacaciones y permisos retribuidos. Ambas partes volverán a reunirse hoy.