Victoria del Caja Laboral Baskonia ante Gran Canaria
Después de la tormenta, emerge Andrés Nocioni
El de Santa Fe se erigió en el líder de unos gasteiztarras que jugaron a tirones. También destacó Heurtel.
CAJA LABORAL BASKONIA 85
GRAN CANARIA 74
Arnaitz GORRITI
Durante su estancia en la NBA Andrés Nocioni declaró, ante la pregunta de unos periodistas argentinos sobre si se veía con opciones de liderar una franquicia, «si yo debo ser el que lidere un proyecto de anillo en la NBA, mal empezamos». El alero de Santa Fe es así: directo, lapidario y a veces brusco, tanto en sus palabras como en sus acciones sobre el parqué. Pero no le duelen prendas en dar un paso adelante, acertado o no, y el que venga atrás que arree.
Por eso, Nocioni, aunque no le alcance para llevar a un equipo a un anillo de la NBA o para ganar la Euroliga, siempre es un elemento con quien hay que contar, porque siempre ofrecerá su máximo. El Gran Canaria, su quinteto titular más bien, puso en aprietos a un Caja Laboral Baskonia mejorado respecto a sus dos últimos partidos, pero muy intermitente. Un muy buen segundo cuarto, que dejaba el resultado 40-30 en tiempo de descanso, dejó paso a un parcial de 0-11 en el que los de Pedro Martínez se colocaron en cabeza, sobre todo gracias a la magnífica dirección de Bellas, que durante ese lapso se «comió» a un Heurtel muy atinado por otra parte.
Tabak llamó a capítulo a los suyos, y lo primero que hizo fue darle calma a Heurtel, para que acto seguido Nocioni levantara la voz y dejara bien claro al base francés que los errores cometidos ya son incorregibles, y que lo que toca es reaccionar para ganar el partido. Así las cosas, aunque con problemas, tanto a la hora de cerrar el rebote -el Gran Canaria campeó en esa batalla por 29-36, capturando 13 rechaces ofensivos, igual que el Baskonia- como para romper el partido, los de Tabak se pusieron manos a la obra, y lograron doblegar a un digno rival, con un buen Heurtel en la dirección, buenos minutos de Causeur, la fugaz reaparición de Jelinek, y minutos más que interesantes de Milko Bjelica, Lampe y San Emeterio. Por otro lado, los jugadores del Caja Laboral redujeron drásticamente su número de pérdidas, algo que evitó que el Gran Canaria corriera o que lograra canastas fáciles.
Lo mejor para el final
En el contexto de un ambiente gélido en lo climatológico y turbio en lo que a la actualidad baskonista se refiere, el Baskonia no dejó que los de Pedro Martínez tuvieran opciones reales de victoria. Los relevos baskonistas, amén de aisladas acciones como un aro pasado de Pleiss o un triple de Nemanja Bjelica, daban una consistencia a la que el Gran Canaria no pudo llegar. Así las cosas, los de Tabak pudieron abrir la brecha hasta alcanzar la decena. Los de Pedro Martínez abdicaron de intentar ganar el duelo.
Lo mejor, empero, llegaría al final. Con el choque decidido, Nocioni logró un mazazo con falta personal incluida, dando un claro paso adelante. El de Santa Fe puso los cimientos de un Baskonia que ahora debe tomar aire y prepararse para rectificar su camino, empezando por el partido que lo enfrenta este jueves al Maccabi de Tel Aviv.
No todos obran así. Por ejemplo, el técnico Simone Pianigiani abandonaba el Fenerbahçe por «motivos personales».
«Lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas», reza el dicho. Más allá de las explicaciones técnicas, interesaba lo que Zan Tabak tuviera que decir sobre la filtración a una web madrileña de la discusión en el vestuario tras el partido ante Olympiacos, y las supuestas multas a los jugadores por bajo rendimiento.
«Cuando entras en un vestuario, con 12 o 13 años, te enseñan una cosa que es el «código del vestuario»: lo que se hace en el vestuario, se queda dentro. Es lo único que puedo decir», declaró el técnico croata al respecto, aunque tras un tira y afloja con la prensa asistente a su alocución, añadiera que se siente «respaldado» tanto por su plantilla como por la propia directiva.
En este sentido, Josean Kerejeta también pronunció unas palabras tras estos días tan convulsos. Con su habilidad de decir lo que nadie espera, el presidente baskonista fue tajante al afirmar que «no hemos tenido nunca un grupo tan unido y comprometido como este». Eso sí, también dejó un recado. «Cuando alguien falla en los códigos de vestuario, no merece estar en el grupo». A. G.