Trabajadores de la empresa Nervacero y de sus contratas se concentraron ayer frente a la planta de esta compañía en el municipio de Trapagaran para pedir que haya «menos presión laboral» y evitar así accidentes como el ocurrido el pasado sábado, en el que un operario resultó herido.

La concentración fue convocada por el comité de empresa de Nervacero, compuesto por los sindicatos UGT, CCOO, ELA y LAB, y en ella participaron alrededor de 200 personas, según señalaron fuentes sindicales.

Los convocantes reclamaron que no haya «tanta presión a la hora de trabajar» para evitar así que se den más accidentes laborales También demandaron mayor concienciación y formación de los empleados y de los mandos en materia de seguridad laboral.

En el acto, los trabajadores de Nervacero y las contratas trasladaron su apoyo y solidaridad al trabajador herido el pasado día 24. El operario, un joven de 29 años vecino de Abanto, accedió a una máquina en la que había una fuga hidráulica y el pie se le quedó enganchado en el carro de la máquina, que se lo seccionó. Este trabajador, que había cambiado su turno para poder jugar un partido de fútbol con el equipo de Gallarta al día siguiente, se encuentra «mal psicológicamente», según informaron las mismas fuentes.

Por otra parte, LAB exigió ayer que se investigue el accidente ocurrido el lunes en el barrio bilbaino de Zurbaran -en el que resultaron heridos dos trabajadores de las empresas Construcciones Zuar y Andamios Europa al desplomarse un andamio-, que se pongan «las medidas preventivas oportunas para que no vuelva a suceder» y se «depuren responsabilidades» al respecto.

«No es un hecho fortuito»

En un comunicado, LAB expresó su convicción de que la instalación cedió «debido al peso excesivo en la base, cuando se estaba produciendo el desmontaje». Para la central, esto es «intolerable», por lo que pidió «que se investigue el accidente, se analicen las causas inmediatas y básicas que desencadenaron el accidente, se pongan las medidas preventivas oportunas para que no vuelva a suceder y se depuren responsabilidades».

A juicio del sindicato, el accidente «no es un hecho fortuito o casual» sino «la respuesta a unas condiciones de trabajo, es decir, para ahorrar el desmontaje lo hacen dos únicos trabajadores».

Sobre este mismo accidente, el portavoz de Bildu en Bilbo, Txema Azkuenaga, se solidarizó con los dos heridos y pidió al Ayuntamiento, que dirige Iñaki Azkuna, que «esa responsabilidad in vigilando que las administraciones públicas tienen, la extreme para que no vuelvan a suceder hechos como éste».