Gipuzkoa cuenta con 319 familias de acogida y 254 menores en pisos tutelados
GARA |
En Gipuzkoa existen en la actualidad 319 familias de acogida, mientras que 254 menores viven en pisos tutelados, según datos facilitados por la Asociación de Familias Acogedoras de Gipuzkoa Beroa.
Estas cifras se dieron a conocer ayer a la mañana en el Koldo Mitxelena de Donostia, donde la integrante de Beroa Maite Pagola participó, junto con los miembros del proyecto Zuondoan, Maite Elias y Mikel Yerobi, en la presentación del documental ``Gu ere harrera familia gara'', que busca «superar la desinformación existente» respecto al tema del acogimiento de menores y atraer a nuevas personas a participar en estos programas, especialmente en la actual coyuntura de crisis económica.
La cinta, que recoge las experiencias de varias personas implicadas en la acogida familiar, es obra de Zuondoan, un nuevo proyecto compuesto por cuatro personas relacionadas de una u otra manera con el mundo de la comunicación y que nace con el objetivo de «dar a conocer temas desconocidos en la sociedad» a través de una serie de documentales, pero «siempre desde un punto de vista positivo», colección que estreno la película ayer presentada.
Además, el documental forma parte de una campaña de información más extensa respecto a la acogida de menores, una iniciativa anual de la asociación Beroa, que en 2013 ha querido renovar la dinámica de su programa, razón por la cual se puso en contacto y ha trabajado en conjunto con ``Zuondoan''.
Dicha campaña se completa con una obra de teatro dirigida a los niños y las niñas, para que los más pequeños también puedan entender en qué consiste ese acogimiento, además de las tradicionales charlas informativas, entre otras actividades.
Estreno en Arrasate
Tanto el documental como la obra de teatro se exhibirán por primera vez el 17 de abril en Arrasate, para después desfilar por otros puntos de la geografía guipuzcoana, si bien algunas fechas están aún sin concretar.
La iniciativa ha querido incidir en la importancia de las familias de acogida para esos menores que, «por diferentes razones», tienen que participar en «algún recurso de protección infantil», algo que Maite Pagola subrayó al manifestar que es preferible que un niño o una niña crezca en el seno de una familia en vez de en una vivienda de acogida.
«Lo mejor es educarlo al calor de un hogar», apuntó Pagola, ya que el vínculo que se crea en los pisos de acogida puede ser «escaso», debido a los cambios de turno en los educadores y al número de pequeños que allí conviven.