Ninguno de los dos contendientes ocupa puestos de play-off ni de descenso. Y, sin embargo, el duelo de Lasesarre se presenta apasionante. Sobre todo porque se trata del derbi de Ezkerraldea que, tras varios años de ausencia, se ha recuperado esta temporada. Y es un derbi como tienen que serlo, plenos de rivalidad sobre el césped y de cordialidad en la grada, como ya se vio en la primer vuelta en Las Llanas y como, así parece indicarlo todo, se repetirá mañana en el campo gualdinegro.

Pero es que además, los puntos importan, y mucho, en ambos casos. Porque, efectivamente, Barakaldo y Sestao River no ocupan puestos de play-off ni de descenso, pero es por bien poquito. Por arriba se mueven los de Iñaki Zurimendi que, con trece jornadas consecutivas invictos, se han ganado el derecho a contar entre los candidatos a la promoción. Pero dos empates consecutivos y la reacción del Eibar la semana pasada les han hecho perder algo de comba, que necesitan recuperar inmediatamente cuando apenas restan diez jornadas por disputar.

Con Basagoiti de vuelta, el equipo fabril recibe a un rival al otro lado de la tabla. Un Sestao River que espera repetir la victoria de la primera vuelta, con el descenso peligrosamente cerca pese a que solo ha encajado una derrota en las seis últimas jornadas. Pero también le cuesta ganar y su reducido colchón le procura solo la tranquilidad justa. Mañana intentará aumentarla unos grados sin el concurso de uno de sus titulares habituales, Hernández, sancionado.

Además de en Ezkerraldea, la 29ª jornada subirá la temperatura en la pelea por la permanencia, con un par de cruces directos. A Osasuna -que recupera a Ekhi y Hugo, pero pierde a Sipo- le toca reencontrarse con el triunfo en su visita a un Teruel al alza, que ahora mismo le supera en tres puntos. También se verán las caras los filiales de Zaragoza y Racing, mientras los otros dos equipos directamente implicados en la pelea afrontan choques de suma dificultad.

Y es que el Izarra -que recupera a Ziganda y Palacios, pero pierde a Etxarri por sanción- recibe a un Amorebieta complicado en cualquier circunstancia, pero más aún cuando su espectacular racha positiva se ha visto rota con dos derrotas consecutivas y, consiguientemente, su ventaja respecto al cuarto y quinto puesto se ha reducido -a 1 y 5 puntos respectivamente-.

La Peña Sport, por su parte, visita a un rival absolutamente enrachado. Tanto, que no descarta engancharse a la pelea por el play-off, que hace un par de semanas parecía absolutamente descartada. Además, el Real Unión -que no podrá contar con Kijera para el choque- protagoniza un envidiable idilio con el gol: ha marcado doce en las cuatro últimas jornadas.

La cantera

Pese a todo, todavía se mueven con ventaja tranquilizadora respecto a los unionistas los equipos en puestos de play-off. Sobre todo el Alavés, claro, camino de batir todo tipo de récords, con una trayectoria que no solo le mantiene líder del grupo, sino que le sitúa como el mejor equipo de toda la categoría.

Hoy tiene una buena oportunidad para ratificarlo, con la visita a Mendizorrotza de la UD Logroñés. Los albiazules -que dedicarán toda la recaudación en taquilla a los clubes convenidos con la entidad, que han tenido la posibilidad de vender localidades a solo diez euros-, de todos modos, tampoco las tienen todas consigo, después de que Gorka Laborda se haya unido al extenso parte de bajas que completan Agustín y Luismi, además de los lesionados de larga duración Negredo y Miguel.

También tiene bajas importantes el Bilbao Athletic, que pierde a dos habituales del once como Bustinza y Erik Morán. Aunque a cambio recupera a Jon García y Kepa Arrizabalaga para recibir a una Gimnástica que llega en cuadro y frente a la que intentarán recuperarse de la derrota que supuso el fin de su espectacular racha en positivo. Continuidad, por otro lado, es lo que busca el Eibar que, sin Añibarro y con la duda de Del Olmo, visita a la SD Logroñés tras reencontrarse con el triunfo hace una semana.

Y ruptura, por el contrario, es lo que necesita el Sanse, que abre hoy la jornada con la necesidad de volver a sumar de tres en tres, después de que los últimos tropiezos le hayan situado peligrosamente cerca -apenas tres puntos de colchón- del descenso. Meho Kodro afronta la visita a Noja con Morgado de vuelta, pero con Etxabeguren, Hervías y Tena en la enfermería.